Béisbol cubano: Los mayores siguen dejando heridas

Tras la buena noticia de la clasificación del equipo Cuba de la categoría sub-12 al Campeonato Mundial del próximo año nuestro béisbol tuvo un momento de alegría, pero la crisis de resultados en la elite se ahondó con la derrota este domingo del elenco asistente a la VI Copa del Caribe.

Empezaron bien la lid los dirigidos por el mentor Alexander Urquiola, pero perdieron dos juegos en la fase clasificatoria, primero contra Islas Vírgenes estadounidenses y luego ante Curazao.

Los dos encuentros fueron decididos por una carrera, pero con matices diferentes, pues en el primero nos dejaron al campo cuando estábamos a punto de la victoria en el séptimo capítulo, último según las reglas del torneo.

Ese fue además un partido en que se jugó muy mal a la defensa, tanto en errores que van a los libros como en otros mentales, a la hora de decidir a quién lanzar la pelota. A cuentagotas se logró dar vuelta al marcador, pero a la hora de recoger los bates le relevo no pudo hacer su trabajo y se complicó el panorama para poder defender la corona.

No obstante, todo estaba parejo entre los concursantes, y vencer este domingo garantizaba la presencia en la final, pero la batería antillana fue dominada totalmente y apenas pudo fabricar una anotación.

El abridor y derrotado José Ignacio Bermúdez no estuvo mal, al conceder solamente dos limpias en 5.2 innings, con cuatro ponches, pero mejor lo hizo el relevista Nkosi Didder por los campeones del certamen en 2021.

Como resultado, estamos condenados a disputar el bronce este lunes contra San Martín, a quien derrotamos sin muchas complicaciones previamente en el estadio Andre Rogers, donde dirimirán el título precisamente los dos conjuntos que nos superaron.

Evidentemente se esperaba más de esta nómina en la que aparecen varios de los peloteros jóvenes más talentosos del país, varios ya con incursión en eventos de primer nivel.

De hecho, algunos de ellos formaron parte de la bolsa de donde salió el plantel que nos representará en el venidero Premier 12 y estaban en pleno proceso de preparación.

Lo que sucede es que en la pelota un juego lo gana cualquiera y hay que ser exactos haciendo lo que requiere cada momento; por una cosa o por otra, seguimos sumando decepciones en nuestro pasatiempo nacional, sin importar mucho el nivel del evento al que vayamos.

Recientemente también dejó mucho que desear Matanzas en otra lid en España, a la que asistió en calidad de campeón de la Liga Elite, así que el ambiente no es nada bueno.

En manos de los involucrados en el Premier 12 está cambiar este panorama, para que no cerremos otro año con satisfacciones solamente en el béisbol 5 y las categorías menores.