Arlen: en los Olímpicos activo el extra

Tiene un palmarés envidiable, con títulos a todos los niveles, pero, sin lugar a dudas, la mejor versión del boxeador cubano Arlen López se ve en Juegos Olímpicos, donde se mantiene invicto tras coronarse tanto en Río de Janeiro 2016 como en Tokio 2020.

Si bien a su primera cita estival llegó con un ciclo perfecto, tras ganar Juegos Centroamericanos, Panamericanos y Campeonato Mundial, no fue así para la edición nipona.

Sin embargo, una vez en suelo japonés, el guantanamero volvió a ser el cinchete de siempre y no creyó en rivales.

A París 2024 llega también con altibajos, sin poder estar en el podio de los certámenes del orbe del cuatrienio, pero con el respaldo del colectivo de entrenadores, que reconoce su entrega, aunque a veces los resultados no acompañen. Al respecto, conversó con CubaSí:

«He demostrado que en los Juegos Olímpicos es donde se activa el extra mío y saco lo mejor de mí, vamos a hacer que eso se repita para terminar en lo más alto del podio. Estamos trabajando para ese objetivo, estoy poniendo todo mi empeño y mi disposición y recibiendo el apoyo de todo el mundo para que eso se dé».

—¿Cómo estás ahora mismo?

—Ahora mismo estoy a un 70 por ciento de preparación. Lo importante es ver cómo me veo, lo que me falta por alcanzar en este tiempo que falta para la competencia, porque debo llegar al 100 por ciento en los Juegos.

—A tu edad, quizás el ritmo de preparación puede pasar factura, ¿cómo soportas las cargas?

—En los entrenamientos me siento que estoy ganando ya, con el enfoque y la preparación sicológica; lo otro sería demostrarlo encima del ring ante cada oponente. No subestimo a ningún contrario, porque incluso cuando le haya ganado antes, se superan constantemente.

—Será una nueva división, ¿te adaptas bien?

—Es solamente un kilogramo menos, no hay mucha diferencia; la preparación y la calidad deben ser las mismas. No me cuesta hacer este nuevo peso y los rivales también son los mismos.

—Acaban de realizar una base de preparación que incluyó un tope. ¿Qué saldo te llevas?

—Tuvimos un excelente campo de entrenamiento en Varadero, nos enfrentamos a un equipo de élite que, además, será sede. Me sirvió en lo personal para ensayar y tratar de conectar mis golpes con la mayor claridad para que no quedaran dudas en los árbitros, porque sabemos que esto es muy importante cuando no estemos en casa.

Si las cábalas se mantienen, y con el interés que le está mostrando el pugilista, es muy probable que en París Arlen haga sonar nuevamente el Himno Nacional de Cuba.