Allá en Matanzas se ha creado... la Faílde
especiales
Hace diez años que irrumpieron en el panorama musical de Cuba dispuestos a defender la tradición y rejuvenecerla. Lo han hecho. El danzón recibió con ellos un aliento de vida indispensable, y no solo el danzón, muchos de los ritmos más auténticos de la música popular en la isla.
En estos años ha habido nominaciones, premios, buena crítica y muchos aplausos, un público que los sigue (quizás sea este uno de los mayores méritos, la creación de un público), pero para Ethiel Faílde, flautista y director de la Orquesta Faílde, lo más importante, lo más hermoso del camino han sido los aprendizajes y la hermandad:
"Diez años se dicen rápido, pero hay mucha entrega, sacrificio, reveses y amor que no caben en estas líneas. Diez años es para la mayoría de nosotros un tercio de nuestras vidas. Es hermoso y complejo mantener juntos a un puñado de jóvenes, que sin experiencia profesional se lanzaron no tras el éxito timbero del momento o a coquetear con la música de moda. Pero ha valido la pena. Somos una familia de hermanos, pequeña, pero muy unida".
"La Faílde ha logrado cohesionarse, ya muestra un timbre, un sonido", valora Ethiel, y asegura que han ganado en experiencia "sin perder la alegría y las ganas de comernos el mundo, propias de la juventud".
No creyeron en fatalismos geográficos, al contrario, donde otros ven un obstáculo, ellos encontraron raíces firmes: "Hicimos experimentos, concretamos algunas ideas y desechamos otras, pero todo siempre desde Matanzas, desde nuestra ciudad, sin mudarnos para La Habana, abriendo un surco en la carretera, pero volviendo siempre y caminando…"
El músico más jovencito de la Faílde tiene 17 años, se llama Ricardito y toca el trombón: "es un hermoso fruto de la enseñanza artística matancera, de su talento y el amor de su familia. Estamos muy orgullosos de él", apunta Ethiel, sin embargo, el trombonista es solo un ejemplo de lo rápido que puede crecer un artista o una agrupación:
"Hemos evolucionado en la madurez de nuestra propuesta artística, timbre, sonido, repertorio, imagen, lo que nos identifica. Hoy tenemos una nómina estable. Mucha gente en Cuba y el mundo conoce ya a la orquesta. La dinámica de nuestras presentaciones en vivo se basa en el equilibrio y potencialidades del formato, con momentos para el lucimiento del conjunto y la alternancia de Yurisán y Yerlanis con temas originales y versiones orquestadas especialmente para y por nosotros. Todo eso hemos logrado llevarlo de un modo coherente a nuestra discografía, que ya pronto estará conformada por cinco discos de estudio y un DVD".
Para Ethiel, hay dos etapas visibles dentro del recorrido de la orquesta: "en el primer quinquenio todo ocurrió más lento, salimos a la palestra y fuimos cambiando lo que no funcionaba, escuchando al público y a los expertos, pero con una proyección muy local. Luego del concierto A Prado y Neptuno, a finales del 2015, y a lo largo del 2016, ocurrieron acontecimientos que nos marcaron para bien y para mal. La pérdida de mi madre, que llevaba un papel esencial en el trabajo de la orquesta; el primer disco con Egrem y la AHS; la aparición de Pedro Pablo Cruz para asumir el rol de mánager y estratega; la celebración del primer Encuentro Internacional Danzonero; perdimos integrantes y de repente no teníamos casi trabajo; pero ante todo eso, nos unimos más, sacamos el extra y volvimos al camino con el apoyo de instituciones como la Dirección Provincial de Cultura de Matanzas, la Egrem, la AHS, el Instituto de la Música y el Ministerio de Cultura.
"En esta última etapa hemos alcanzado una proyección nacional e internacional. La presencia en el Kennedy Center de Washington y en más de 20 ciudades de México, Canadá, Martinica y Perú; las colaboraciones con nuestra amada Omara Portuondo y Lizt Alfonso Dance Cuba; el Premio Cubadisco en 2019; la nominación al Grammy Latino en 2020 y las menciones a nuestro quehacer en medios como Billboard, The Washington Post o Songlines, son apenas una muestra de ello".
Lógicamente, han tenido que propiciar cambios y adaptarse a los que llegaron sin planificación, porque así es la vida, pero algunas cosas, afirma Ethiel, no cambiarán nunca:
"La verdad con la que asumimos todo nuestro repertorio, partiendo del danzón. Esa sonrisa y esa manera de sentir la música no ha cambiado, los años nos han permitido conectar mejor con las esencias, afirmarnos a nosostros mismos. Otra cosa que no ha cambiado es la alegría y el buen ambiente, el cariño que nos tenemos todos, músicos y equipo, cuando alguien se enferma, cuando hay que cuidar a Isabela, la hija de nuestra violinista Rosalí, cuando hay fiesta. No hemos perdido el respeto por el ensayo, incluso creo que lo valoramos y aprovechamos más. Al escenario no se va a montar o inventar, el experimento ocurre en el ensayo, eso es respeto al público y a nosotros mismos, lo cual no quita que haya espacio para la alegría, la espontaneidad y la improvisación, pero con las bases muy claras.
"El amor a Matanzas, su cultura y su gente, es algo que siempre estuvo y estará. Tenemos una premisa: por donde entre la Faílde, entra todo el talento matancero que quepa. Ahí está Danzoneando TV y otros programas que hemos hecho, las producciones audiovisuales y eventos, para los que hemos convocado a una larga lista de artistas de este terruño".
En estos momentos, la Faílde está grabando su quinto fonograma con la EGREM, que debe estar a finales de mayo en plataformas digitales. Sobre el álbum, nos adelantó el director de la orquesta que "contará con colaboraciones de artistas que admiramos mucho como: Omara Portuondo, Silvio Rodríguez, Alexander Abreu y Gaby Moreno (Guatemala), por solo citar algunos. Trae danzones antológicos, nuevas composiciones y, por supuesto, son, guaracha, timba, bolero, chachachá... todo lo que hace normalmente la Faílde en un concierto.
¿Otros proyectos? Por supuesto: "Luego comenzaremos a trabajar en un disco de música para niños con Omara. Además, estamos desarrollando un espacio todos los domingos, a las 10 p.m., en el Cabaret Continental de Varadero, un producto bastante singular para la noche del balneario y que quiere mostrar con dignidad y hermosa la cultura matancera. Desde el mes de febrero estamos de gira por nuestra provincia gracias a la voluntad de la Dirección Provincial de Cultura, algo que nos tiene muy entusiasmados porque hay municipios que no conocíamos, y en paralelo realizamos una gira con la Compañía Verdarte por diferentes barrios de La Habana, llevando el espectáculo musical con todos sus ingredientes hasta la comunidad.
"Hay voluntad por parte de Cubavisión para que Danzoneando regrese a la parrilla de programación, ya todas las ideas están listas, guiones y repertorio para cuando ,nos den luz verde, algo que suponemos debe ocurrir en la segunda parte del año".
Parece bastante trabajo para diez años, pero ellos sienten que les "falta muchísimo. Tenemos tantas metas y sueños, que no caben en esta entrevista y que nos sirven para caminar. Te menciono unas pocas: tener un espacio fijo en la ciudad, un encuentro sistemático con nuestro público más fiel, el que mejor nos conoce y nos ha visto nacer y crecer; que se baile más en Cuba, danzón, son, timba, que esa hermosa expresión de nuestra cultura no se pierda nunca y podamos imprimirle nuevos bríos; que las calles y escuelas de Matanzas lleven los nombres de nuestros mejores artistas; que sigamos juntos sin “creernos cosas”, haciendo cada cual su parte en la familia Faílde, creciendo como artistas y como seres humanos".
"Sigue ese camino que no está cerra' o, / Sigue ese camino, pero con cuida' o… dice el coro de uno de sus temas, y también es lo que se propone la Faílde para los próximos diez años con "licencia de mis ancestros, /Presto el oído, bajo el pescuezo/ Si un mayor me da la clave/ Yo siempre escucho al maestro.
"Faílde es más que apellido/ Soy mestizo, soy la esencia,/ Yo vivo de preguntar/ No me llames competencia".
- Añadir nuevo comentario
- 1125 lecturas
Comentarios
Juan Carlos Subiaut Suárez
Añadir nuevo comentario