El complejo de piscinas Baraguá era un enjambre. Sede de las competencias de los Juegos Escolares, además de la vorágine preparatoria para los Juegos Panamericanos de Lima de parte de la propia natación, el clavados y el triatlón.

Precisamente con esta última disciplina tuvimos la posibilidad de intercambiar. Dióseles Fernández, entrenador principal de triatlón explicó que la preparación fue bastante buena, con el cumplimiento de la ruta crítica proyectada, y pormenorización de los objetivos no solo de cara a Lima, sino también en lo concerniente a lo competitivo para que ellos crecieran en el entorno continental.

“Realizamos una base de entrenamiento de altura en Cuenca, México, muy provechosa y a 2 600 metros sobre el nivel del mar.

Leslie Amat tuvo la posibilidad de participar en algunas competiciones más, por la ayuda que recibe tanto de la Federación Internacional como por la CAMTRI (Confederación para las Américas de Triatlón), y estuvo en el Campeonato Panamericano de la disciplina, y una fase de Copa del Mundo.

Ella ha logrado estabilizar rendimientos, pues de cuatro Copas Panamericanas en las que participó alcanzó podio en todas, sin sabor a oro, pero se ve en muy buenas condiciones después de su rehabilitación de la fractura del dedo.

Previamente hizo un entrenamiento de tres semanas en Guadalajara (1 600-1 800 metros), en el cual además de beber de otros sistemas de entrenamiento, pudo modelar a las principales figuras mexicanas, muy fuertes por cierto en el panorama continental.

Tras esa base, la sometimos a tres eventos durante fines de semanas consecutivos y su respuesta fue muy buena, sometida a cargas elevadas en un período de tiempo prolongado, codeándose con adversarias cualitativamente superiores.

Hizo una Copa Panamericana en distancia olímpica, luego encaró la Copa del Mundo, (recaló en el 24 con varias de las mejores del ranking mundial presentes).

A Cuenca, con excepción de Michel González, producto del nacimiento de su bebé se quedó en La Habana entrenando, asistieron igualmente los otros dos atletas que estarán involucrados en los Panamericanos: Daniela Ciara y Víctor Herrera. Además, nos favorece el hecho de contar con un evento punteable como el Triatlón de La Habana.

En el caso de Daniela, es doble campeona centroamericana juvenil. Ha venido progresando en el último año, amén de que el desarrollo de nuestra modalidad en el Mundo ha sido bien vertiginoso”, ahondó Dióseles.

¿Principales cartas y propósitos puntuales en tierras del Cuzco?

“En el caso del femenino son las estadounidenses las favoritas. Como potencia tienen a tres entre las diez primeras del ranking mundial, y ocho entre las de la CAMTRI, lo que significa que cualquiera de las dos representantes que lleven sale como candidata al oro, aun cuando en esta oportunidad no haya boleto olímpico para los ganadores de uno y otro sexo, como sucedió en Toronto 2015.

Luego estaría la canadiense Joanna Brown, atletas de Brasil, México, Chile (Bárbara Riveros) y Ecuador”, puntualizó el timonel.

Para tener una idea más precisa, Leslie, nuestra principal carta se ubica en el escaño 23 del escalafón CAMTRI con 1 490.46 puntos y seis eventos en su haber, en tanto Daniela Ciara se sitúa en el 46-712.02 con cuatro lides.

“Los varones tienen bastante repartida las opciones a tono con la élite de América. Hablamos del canadiense Tyler Mislawchuk (1ro-3 879.82), los representantes de Estados Unidos (siete colocados dentro del top 15 americano), y una cuarteta de mexicanos fundamentalmente, con Crisanto Grajales a la cabeza.

Con ese panorama y en un escenario competitivo en condiciones de altura, el propósito nuestro es que Michel mejore su ubicación en el puesto 18 de Toronto; Leslie mejorar el escaño 14, Víctor en un rango del 16-20, y Daniela entre el 18-22.

Hablando con objetividad, será en extremo difícil lograr una medalla, independientemente de la progresión de nuestros cuatro representantes, y la estabilidad de rendimientos mostrada por Leslie, esencialmente”, sentenció el preparador antillano.

Con inicio en el programa de competencia de Juegos Panamericanos en la edición de Mar del Plata 1995 para uno y otro sexo, el botín dorado del triatlón hasta este minuto se lo han repartido a razón de Estados Unidos (cinco cetros), Canadá y Brasil (2), México, Chile y Venezuela (1).

Cuba no ha podido festejar aún del festín de las preseas. Habrá que esperar a ver qué sucede los días 27 y 29 de julio cuando los nuestros vayan al ruedo.