Vizcaíno y César, dos baluartes para Villa Clara
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Varias figuras sobresalen en la nómina del equipo de Villa Clara que interviene en la 58 Serie Nacional de Béisbol. Algunas, sin tener un gran historial como aval, se han ganado a la afición con sus excelentes actuaciones.
JIT se acercó hace poco a dos de los “héroes” anaranjados, quienes han contribuido a los notables resultados del plantel dirigido por Eduardo Paret.
EL GRAN REMOLCADOR
Yurién Vizcaíno debutó como lanzador en nuestras series nacionales, pero sus principales resultados han llegado desde el cajón de bateo. El zurdo de Santa Clara está envuelto en una excelente campaña, al punto de comandar a los remolcadores. Hablamos de un cuarto bate inamovible y del bateador más oportuno del campeonato.
«Cuando vengo con hombres en posición anotadora trato de concentrarme un poco más para que las cosas salgan mejor en ese momento y traer las carreras importantes que ayuden al equipo», asegura.
Vizcaíno no transitó por la pirámide del deporte cubano, lo cual influye (quizás) en que presente deficiencias a la hora de discriminar lanzamientos.
«Eso me falta. Tengo que entrenarlo más. Necesito achicar la zona de bateo porque ahora es demasiado amplia. A veces me voy con bolas muy malas. Sin embargo, trato de pegarle lo más fuerte posible para conseguir los objetivos ofensivos», apuntó.
El éxito logrado este año se debe al trabajo realizado previo a la competencia: «Me preparé para que salieran las cosas. No pensé en tan buenos resultados, pero siempre me enfoqué en lograr una forma óptima».
El hombre más productivo de Villa Clara en la contienda se muestra optimista con respecto al futuro de su selección: «Primero luchamos por llegar a los play off, después no nos quedará otra opción que ir por el campeonato».
Yurién pudiera romper el récord de carreras impulsadas para un pelotero villareño en una temporada. La marca es de Oscar Machado con 87 desde la 37 Serie. Sería la coronación de una campaña inolvidable. ¿Podrá conseguirlo?
UN HOMBRE PROA DE LUJO
El cienfueguero César Prieto llegó como refuerzo a la selección anaranjada para la segunda fase del torneo.
Muchos aficionados y especialistas criticaron a Paret por solicitar a un joven con poca experiencia al máximo nivel. Por si fuera poco, el otrora torpedero le daría la responsabilidad de cubrir la llave del cuadro.
El sureño, que traía como palmarés los títulos de bateo en el campeonato nacional juvenil, la Liga Élite Junior de Quebec, el torneo del orbe juvenil y la V Serie Nacional de Béisbol Sub 23, ha sido una sensación como primer bate.
El muchacho de Abreus muestra habilidades con el madero, una velocidad envidiable y carácter de guerrero.
Todo eso lo ha podido demostrar con creces durante esta segunda fase.
«Me vino muy bien que me solicitaran como refuerzo. Los resultados se deben a la gran acogida dada por el equipo desde el primer momento», reconoció.
César siempre tiene una carta bajo la manga para embasarse, una capacidad que le ha granjeado todo tipo de elogios. Su porciento en ese indicador es superior a 400. Para mayor mérito suma más de 100 indiscutibles en su primera campaña como titular, ya que en la serie pasada solo tuvo 20 comparecencias al home.
«Las cosas me han salido como esperaba. El objetivo en cada turno es tratar de llegar a primera base por cualquier vía. Esa es mi función en el equipo. Busco recursos para cumplir con mi responsabilidad», afirma sereno.
En el campo corto lo ha hecho bien, siempre bajo la mirada certera de uno de los mejores torpederos de la historia del béisbol cubano.
«Me siento muy cómodo en el campo corto. El profesor Paret está constantemente dándome consejos sobre la posición y eso brinda mucha confianza», enfatiza.
Yurién Vizcaíno y César Prieto han sido piezas claves en el engranaje de la maquinaria de Villa Clara. Sus aportes resultarán decisivos en la postemporada.
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