La Unesco rinde tributo a la rumba y al punto cubano

La sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), en París, acogió este lunes un homenaje a la rumba y al punto cubano, expresiones que fueron declaradas Patrimonio Inamterial de la Humanidad por este organismo internacional.

Gran privilegio el de Cuba: dos de sus más importantes complejos culturales integran una lista avalada por prestigiosos especialistas de todo el mundo.

Se dice fácil, pero si uno toma en cuenta el gran entramado de las artes en el mundo, el acervo patrimonial de los pueblos... tendrá que convenir en que un país relativamente pequeño ha aportado mucho al legado universal.

La rumba y el punto cubano son expresiones vivas, paradigmas de una cultura de resistencia, con altos valores éticos y estéticos. Han sido también voz de los que se vieron oprimidos. Ámbito de creatividad popular.

De eso hablaron el doctor Miguel Barnet y el periodista Pedro de la Hoz en sus conferencias.

La de Barnet estuvo dedicada a los multiples caminos de la rumba, y la de De la Hoz a las características del punto cubano, con sus variantes regionales.

Que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura haya reconocido a estas dos manifestaciones es motivo de satisfacción, pero también una responsabilidad, consideró la embajadora Dulce Buergo, delegada permanente de Cuba ante la Unesco.

Para Miguel Barnet la inclusión de las dos expresiones en esta importante lista habla de la fuerza de la cultura cubana, y del potencial creativo de un pueblo.

La presencia de Barnet en la Unesco significó un regreso a la sede de una organización ante la que fue representante por varios años.

La sesión de este lunes se insertó en la séptima asamblea de los estados parte de la Convención de la salvaguarda del Patrimonio Inmaterial.

Un momento de gran trascendencia fue la entrega del certificado oficial de la inscripción del punto cubano al registro del patrimonio inmaterial de la Unesco. Gladys Collazo, presidenta del Consejo Nacional de Patrimmonio Cultural la recibió de manos de Tim Curtis, secretario de la Convención.

Hay consenso en algo: la rumba y el punto cubano son solo el comienzo. Cuba tiene mucho más que ofrecer.
“Primero fue la rumba, después fue el punto cubano, mañana será el son, las parrandas… El patrimonio de Cuba es riquísimo, yo siento un gran orgullo de ser cubano, parte de un pueblo que ha entregado tanto al arte universal, y que se ha servido del arte para enfrentar todas las vicisitudes que ha vivido a lo largo de la historia”, dijo Barnet.

La sesión en la Unesco fue también el final del programa del V Fórum Timbalaye "La ruta de la rumba", que ha tenido por escenario ciudades de Italia y Francia.