Copa Mundial Rusia 2018: Armadas a sus grupos, ¿langostas en su salsa?
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Desde la A hasta la H, con millones de aficionados prestos a desatar sus pronósticos y vestir sus respectivas casacas de hinchas fieles en cualquier latitud, la magna fiesta del más universal toca a las puertas, con 32 naciones prestas a pugnar por una copa que solo han acariciado en 20 ediciones ocho países.
Europa (11 cetros) y América (9) concentran el poder, en tanto solo dos combinados en representación de otras zonas geográficas han podido acceder a semifinales: Estados Unidos (1930), y Corea del Sur (2002). En ese concierto Brasil (5 trofeos), Alemania e Italia (4) son los máximos ganadores.
Por cierto, en materia de animadores, esta Copa tendrá notables ausencias, como la de la propia escuadra azzurra, los estadounidenses, Holanda y Chile, por solo mencionar elencos de contundencia en la última década.
En el colimador
Con este entrante histórico toca adentrarnos en la realidad de las ocho llaves y en una premonición inicial lanzar predicciones sobre los posibles agraciados que consideramos contenderán en octavos de finales:
La llave A se compone de los anfitriones rusos, Egipto, Arabia Saudita y Uruguay. A todas luces, por tradición y calidad futbolística, deben avanzar los locales y la garra charrúa. Los avalan, si bien hemos dicho en otras ocasiones que el ranking Mundial de la FIFA no se comporta en ocasiones 100% fiel, respectivos lugares 65 y 21 los avalan. Ojo, no se debe descuidar a Egipto (31). Casi todos los gurúes coincidirán en que Arabia Saudita debe ser la Cenicienta. A Rusia además lo respalda su condición de locales.
El B tuvo en Portugal a su cabeza de apartado. España, Marruecos e Irán completan el segmento. Acá hay un morbo adicional y rivalidad exacerbada entre lusos e ibéricos pues las principales estrellas de ambos onces cohabitan y rivalizan en la Liga española y otras competiciones de rigor europeas. No descartar a los marroquíes, en un renacer de rendimiento. Irán (32 del escalafón) casi seguro estará llamado a ser el colero, toda vez que portugueses (terceros), españoles (sextos) y marroquíes (40) exhiben una accionar más sólido en su juego. Lusos y españoles son mis cartas de avance, y se verían las caras en octavos tentativamente con rusos y uruguayos.
En el C el panorama parece más despejado. Francia y Dinamarca tienen todas las papeletas desde mi óptica, con distancia marcada sobre Australia y Perú. Baste echar una ojeada a los puestos nueve y 12 de galos y daneses, aunque una muestra de que el listado no siempre se corresponde con la calidad real de los conjuntos es el hecho de que los Incas peruanos aparecen en la posición 11.
Más complicado y compacto se vislumbra el panorama en la llave D, máxime cuando Argentina ni por asomo se asemeja a la potencia histórica que es. Sus últimas exhibiciones han dejado mucho que desear, prácticamente estuvo a punto de repescarse y no encuentran conexión entre Messi y los restantes hilos de la nave. Esa situación coloca a Islandia, Croacia y Nigeria casi prestos a batirse de tú por tú. Los islandeses tuvieron una clasificación de ensueño. Croacia cuenta con empuje y de la mano de la dupla Rakitic-Modric pueden sacar el sable, en tanto las águilas negras nigerianas son uno de los conjuntos africanos históricamente temibles.
Igualmente sin muchos contratiempos se perfila Brasil en el E. Suiza y Serbia a mi juicio deben estarse disputando entre ellas la segunda papeleta a los octavos, pues Costa Rica, al menos en el papel, se pinta como el menos sólido. Sin embargo, los ticos enseñaron su poder de fuego en Brasil 2014. Por ranking brasileños (segundos) y suizos (octavos) deben dar la nota.
En apariencia tranquilo, pero puede que no lo sea tanto, el apartado F tiene en Alemania a su principal candidato. Los tanques teutones encabezan el escalafón y objetivamente poseen un nivel de calidad superior al de Suecia y México. Los sudcoreanos no entran en un plano de descarte ni mucho menos. Además de que conocen lo que es avanzar hasta semis en este tipo de competición, cuando gozaron de la localía, y de algunas bondades arbitrales en el 2002. Recordemos su desafío ante los italianos. Me inclino por los vikingos suecos para acompañar a la Mannschaft.
Recalamos en otro río con dos corrientes europeas que sobresalen: Bélgica e Inglaterra. Son candidatos incuestionables a avanzar por encima de Panamá y Túnez. Los belgas han conjugado una generación de ensueño y ahora casi la totalidad de esos jugadores llegan con mucha más madurez que hace cuatro años en suelo auriverde. De hecho, el protagonismo de varios en sus respectivos certámenes ligueros, hacen pensar en una escuadra que puede emerger como seria aspirante a los puestos de honor.
Los ingleses encararon una clasificatoria bastante segura y tranquila y deben resolver sus pleitos ante istmeños y tunecinos sin mayores contratiempos. La nave de Kevin de Bruyne, Hazzard y compañía se ubica quinta entre las mejores del orbe, mientras los británicos son decimoquintos.
Cierro con el grupo H, donde si bien el panorama pre-competencia favorece a la Polonia de Levandowski y la Colombia de James, no se pueden excluir a japoneses y senegaleses. Comoquiera que hablamos de la Copa Mundial de la FIFA, el favoritismo es hasta un punto y continuarán en la ruta aquellos que combinen mejor sus armas a la hora y en el lugar indicado.
Cubasí lanzó su primera predicción sobre la base de la composición de los grupos. Baja el telón con algunas pinceladas: en 20 ediciones previas se han totalizado 2 379 goles, de ellos 41 autogoles. El mayor goleador de un certamen fue el francés Just Fontaine (13 en Suecia 1958), en tanto el colombiano James Rodríguez se erigió como goleador al convertir seis dianas en Brasil 2014. Rey de reyes puede nombrarse al germano Miroslav Klose, dueño de 16 perforaciones, una más que el fenómeno Brasileño Ronaldo.
Por ahora nos despedimos, pero descuide, antes del 14 de junio del 2018 habrá mucha más tela por donde cortar y otros disímiles análisis que compartiremos con usted.
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