Play off: tensión y fiesta sin olvidos

Luego de una serie demasiado extensa para el gusto de muchos (96 juegos es imposible volver a soportar), la postemporada o play off de nuestro campeonato nacional de béisbol marcha “viento en popa y a toda vela” hacia tierras sureñas, espirituanas, granmenses y avileñas.

La serie de cuartos de final tensiona los nervios de peloteros y mánagers, sobre todo de los cinco debutantes en esta ronda: Lázaro Vargas (Industriales), Ramón Moré (Villa Clara), Ruperto Zamora (Sancti Spíritus), Indalecio Alejandrez (Granma) y Juan Miguel Gordo (Las Tunas), en tanto Víctor Mesa (Matanzas) regresa a esta ronda tras haberlo hecho antes con los naranjas, e Iday Abreu (Cienfuegos) y Roger Machado (Ciego de Ávila) suman al menos dos experiencias anteriores.

Justo es decir que el mejor cierre de la etapa clasificatoria quedó reservado para la zona oriental, al tiempo que la fiesta actual trasciende a las ocho provincias representadas, pues se trata del principal espectáculo deportivo, social y cultural del país, que nadie quiere perderse en los estadios o frente a la tele.

A las iniciativas de cada territorio deben acompañarlas siempre la disciplina sobre el terreno y en las gradas. Un ejemplo vivido recientemente en el Latinoamericano —colocaron por vez primera una pantalla gigante en la zona izquierda— demostró que este tipo de ideas es excelente por naturaleza, pero deben controlarse detalles mínimos como el volumen del audio, de manera que no saque de concentración ni a peloteros ni al público.

Antes que el nuevo campeón desborde las opiniones del pueblo y nuestros medios de comunicación, es preciso no olvidar al menos tres selecciones que se quedaron a las puertas de la postemporada de esta LI Serie Nacional de Béisbol: Pinar del Río –titular del 2011–, Santiago de Cuba y Guantánamo.

Los vueltabajeros no podrán defender su corona y se impone trabajar para la venidera edición en la cohesión del conjunto para retomar esa vanguardia, en tanto los santiagueros pudieron colarse por ellos entre los ocho finalistas, pero cayeron par de veces nada menos que con el débil cuadro de Mayabeque, y por segunda ocasión consecutiva ven desde la televisión los play off.

Guantánamo estuvo muy intermitente en la campaña y pagó caro una reacción tardía. De cualquier manera, hay mucha tela para cortar en los análisis que se hagan con los tres equipos, en pos de devolverle alegría a sus respectivas aficiones.

Por el momento, Las Tunas se ha convertido en el “equipo eléctrico” de la postemporada con par de victorias contundentes sobre los avileños, mientras el resto de las subseries marcha abrazada a una victoria por bando. ¿Alguien se atreve a dar un favorito? Mejor esperamos al miércoles venidero.