El primer buque carguero multipropósito, construido para Venezuela en el Astillero Damex, de Santiago de Cuba, fue entregado oficialmente al país sudamericano para ser utilizado por la Armada Bolivariana, anunció hoy el diario oficial "Granma".

La fabricación del moderno navío forma parte del proyecto integrador de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba).

La embarcación de acero posee 57,27 metros de eslora y 12 de manga, y puede transportar 42 contenedores u otras cargas generales en cubierta, además de cargas en bodega, y llevar en sus tanques 200 toneladas de agua e igual volumen de combustible, acorde con las 740 toneladas de máxima capacidad de carga, precisó el rotativo.

El vicealmirante Ricardo Rafael Sanz Ferrer, comandante naval de logística de la Armada Bolivariana de Venezuela, explicó que la nave autopropulsada será destinada al comercio internacional y al apoyo de acciones humanitarias ante eventuales desastres naturales.

Se trata de un buque para la vida y para la paz, que en fortalecimiento de la integración latinoamericana podrá transportar materiales de construcción, maquinarias pesadas, alimentos y todo lo necesario en pro del bienestar de los pueblos hermanos de las islas del Caribe oriental y las naciones del Alba, dijo el oficial, citado por Granma.

Por la parte cubana, el director del Grupo Industrial de Astilleros, Nelson Torres Pérez, señaló que se trata de una embarcación dotada de modernos sistemas de navegación, comunicación satelital y propulsión con doble hélice, ideal para la transportación en el área caribeña.

Sobre el quehacer y la calidad de las construcciones navales de DAMEX, el directivo cubano añadió que este año se terminará el segundo transportador logístico con similares características, y los dos restantes serán entregados en 2013, y que en breve se iniciará la construcción de dos patrulleros.

El diario explicó que el pasado fin de semana partió hacia Venezuela esa embarcación, que por resolución ministerial llevará el nombre de Los Frailes, en recuerdo al victorioso combate librado en el archipiélago de igual nombre por la Expedición Naval Libertadora de Venezuela, frente a una escuadrilla española, el 4 de mayo de 1816.

Dijo que a la ceremonia asistieron el embajador venezolano en Cuba, Edgardo Antonio Ramírez; el jefe de la Marina de Guerra Revolucionaria de la isla, contralmirante Carlos Alfonso Duque Ramos, y el viceministro de Transporte cubano para la rama marítima, Lázaro Machado Martínez.