Google + Kcho.MOR: un diálogo entre gigantes

En su estudio, corazón del Museo Orgánico de Romerillo (MOR), conversamos con el artista cubano Alexis Leyva Machado, Kcho, sobre el aula tecnológica que acaba de inaugurar en estrecha vinculación con especialistas de Google. Sobre el origen del proyecto, nos contó:

«Estábamos en Washington, en el momento histórico de izar nuestra bandera allá en julio del año pasado, y tuve la oportunidad de conversar con algunos directivos de Google. Empecé a hacer bromas en el hotel con que la conectividad era malísima, que el hotel tenía menos velocidad que la Biblioteca Juan Almeida Bosque de Romerillo, por supuesto, que eso estaba motivado porque eso es un servicio que se cobra, el hotel se lo cobra a sus clientes, aunque parezca gratuito, pero lo incluye en el precio de hospedaje, etc. Entonces Google había hablado de un globo que ellos habían inventado para ofrecer internet gratuito en el mundo, que lo pusieron en Burundi y en Haití; que lo van a poner, o sea, en países en desarrollo. Entonces, en medio de esas bromas, les pregunté que por qué no habían estado nunca aquí en Romerillo. Los invité en julio y vinieron en agosto, un día muy particular, el 13 de agosto, cumpleaños del Comandante en Jefe. Había un tronco de fiesta aquí del barrio, con un cake verde olivo riquísimo, con todos los niños, fue una experiencia, como siempre, hermosa...

Foto: L Eduardo Domínguez/Cubadebate

«Después de ese recorrido, me hicieron una propuesta, me preguntaron que si me molestaba mi nombre asociado al de Google y les dije no, para nada, Google es un gigante global, de Alphabet, una de las empresas más grandes del mundo, pero este es un país gigante también, y yo soy hijo de este país gigante. Todo lo que hago lo hago por Cuba, así que no me molesta para nada mi nombre asociado a ese gigante que es Google, si va a ser un beneficio para mi patria y para mi pueblo.

«Empezamos a trabajar en una idea. Siempre en todas las actividades que hicimos participaron nuestras autoridades pertinentes en cada tema, y entonces fuimos exactos en que esto que vamos a hacer aquí es contra el bloqueo, contra las medidas que la OFAC (Oficina de Activos Extranjeros) tiene contra Cuba por demasiado tiempo, que impiden nuestro desarrollo, nuestra evolución lógica como cualquier país; y es un puente que se abre, esa es la idea inicial, con eso, capaces de hacer cualquier cosa, cualquier sacrificio…»

Sin embargo, estas medidas iban mucho más lejos de lo que los propios representantes de Google podían imaginar: «un día llegan aquí y me dicen: hemos violado la ley, y me cuentan que la OFAC tiene sobre mi persona un impedimento, que exige una licencia especial y específica para hablar con Kcho. Me sentí feliz de esa confirmación porque la OFAC me trata como trata a Cuba, y me siento orgulloso de ser tratado como tratan a mi país. Me hizo sentir muy especial esa noticia tan bien contada por la gente de Google del significado legal de que algo como la OFAC esté detrás de una persona natural y lo que representa eso para su desarrollo, su evolución, y más si es un artista. Pero así y todo está Google aquí hablando conmigo y hemos hecho lo que hemos hecho y esa medida de la OFAC no me ha detenido, yo he hecho mi carrera, estoy en los museos del mundo que me toca estar, colectivamente hemos sido capaces de hacer muchas cosas, desde en un desastre en Cuba, hasta en un desastre en Haití, y aquí estamos trabajando en la vida cotidiana, que es muy compleja, especialmente en un país bloqueado…»

Foto: Annaly Sánchez/CubaSí

El aula tecnológica habilitada en el MOR para el uso de la comunidad cuenta con productos como las Crombo, computadoras cuya memoria interna es mínima, pues utilizan un espacio del almacenamiento virtual al que aún Cuba no tiene acceso pleno, se nos niegan desde opciones tan elementales como descargar la bandeja de entrada del servicio de correos Gmail hasta la posibilidad de instalar aplicaciones promocionadas por Google como libres y gratuitas, o comprar más espacio en la nube, aún para extranjeros que intenten hacerlo desde la isla; sin embargo, nadie piensa en renunciar:

«Aquí ya estamos trabajando, número uno, permitiendo que las personas tengan la experiencia de comunicación única que dan estas nuevas tecnologías, porque nosotros no recibimos ningún beneficio económico por nada de lo que hacemos. Los beneficios, no solamente yo, los cientos de personas que han trabajado conmigo siempre, los recibimos el día que fuimos educados por un país, una nación, una Revolución que tiene una visión tan certera de lo que es el futuro. Entonces a esa energía está dedicada ese espacio; a que los cubanos y cubanas, a pesar del bloqueo, puedan tener acceso a elementos tecnológicos que aún están limitados para Cuba. Muchos de esos soportes están bloqueados para Cuba, es una tarea en la que venimos trabajando junto con Google y que hemos llamado Abajo el bloqueo, abajo el error 403, la limitante que dan, por medidas de la OFAC, los productos de Google para Cuba».

Foto: L. Eduardo Domínguez/Cubadebate

Los equipos donados por Google fueron previamente desbloqueados, pero aún persisten las leyes que violan el derecho de esa empresa norteamericana de mostrar en su máximo potencial sus productos, y los del pueblo cubano de disfrutarlos totalmente. El desafío a las regulaciones es explícito, pero, según Kcho, «sin miedo, pues esto es una acción de paz, de armonía, de educación, de amor, de diálogo, todo lo contrario de lo que es una acción de guerra, una herramienta de destrucción implementada para destruir el futuro de este país y no lo lograron, entonces ya es hora de que esa horrible página desaparezca con el mensaje más poderoso: que nunca se le puede volver a hacer eso a ningún país del mundo, es inhumano tratar de rodear a un pueblo por una forma de ver la vida diferente a la tuya».

La idea de Kcho es muy clara: «este espacio ha sido una fusión para mí necesaria, porque soy un convencido de que el arte lo puede cambiar todo. En esta convicción yo estoy cada día más claro del valor que tiene unir el arte y la tecnología. Este nuevo contexto tecnológico me ha permitido llegar a una conclusión tecnológica importante: el tiempo es irreversible, y eso lo da la tecnología, no importa que el bloqueo no te haya posibilitado usar algún elemento tecnológico hace cuarenta años o hace quince, o cuando se hicieron las aulas de computación en las escuelas cubanas, y ahora están todas obsoletas porque el bloqueo es uno de los elementos que impide que uno vaya evolucionando todos los días. No importa, porque ahora hay cosas nuevas que lo cambiaron todo y mañana habrá otras que lo cambiarán todo; las herramientas de mis hijos no serán las mismas que las mías, entonces uno dice, bueno, no importa el tiempo que me has hecho perder, lo puedo recuperar porque este es un país educado y ese es un potencial inmenso del cual el mundo no tiene aún conciencia, este país puede lograr cualquier cosa gracias a eso. Si hablamos de salud, por ejemplo, este país logró cortar la línea de muerte en la transmisión del VIH de la madre al hijo, eso solo se puede hacer en un sistema de salud como el cubano y el mundo está a sesenta años de eso porque no se puede hacer con dinero. Hay que aceptar la visión de salud de Fidel Castro y muchas otras visiones de él. Este país ha hecho cosas únicas en el planeta, ha cumplido con los objetivos del milenio. Yo estuve ahí en la ONU y lo vi, al mundo agradeciéndole a la Revolución cubana muchos cambios importantes que el mundo ha tenido en los últimos años».

Antes de despedirnos, Kcho quiere reconocer un apoyo que, a su juicio, ha sido fundamental en todo este proyecto: «para mí es muy importante que se respete y se considere en la justa medida el esfuerzo que hace una compañía como ETECSA, a pesar de todas las limitaciones tecnológicas que le impone el bloqueo y todas sus medidas adicionales. Es una inversión, una empresa del pueblo de Cuba, al final de la jornada, que hace lo mejor que puede en un panorama hostil, porque no podemos usar nada de primera línea, tenemos que estar limitados a determinados mercados y elementos tecnológicos; entonces esta compañía nuestra nos ha dado, como le da a Cuba, todos los servicios necesarios. La conectividad del nuevo espacio del que estamos hablando la pone nuestra compañía de telecomunicaciones ETECSA».

Foto: Annaly Sánchez/CubaSí

Desde el 21 de marzo, vecinos de Romerillo, niños de las escuelas del barrio, visitantes, se benefician con este nuevo espacio cuya pretensión, nos explica la periodista Leisy Rubio, es ofrecer a los cubanos la oportunidad de interactuar de una forma única con lo más actualizado de las tecnologías; realizar visitas a diversos destinos a través de las Cardboard, una simple caja de cartón que, a través de las aplicaciones desarrolladas por Google, nos sumerge en la realidad virtual; impartir video-conferencias para las universidades, incluso con los propios especialistas de Google, entre otras posibilidades.  

«El vínculo es real», afirma Kcho, «eso que dice Google + Kcho.MOR no es un chiste, es producto del trabajo serio y consciente de un país por mucho tiempo; a ese país es al que yo represento, así que cuando Google se acercó a Kcho, se estaba acercando a Cuba, y eso es lo importante».

Foto: Annaly Sánchez/CubaSí 

Foto: Annaly Sánchez/CubaSí

Foto: Annaly Sánchez/CubaSí

Foto: Annaly Sánchez/CubaSí  

Foto: Annaly Sánchez/CubaSí

Foto: Annaly Sánchez/CubaSí

Foto: Annaly Sánchez/CubaSí