Marlies Mejías: Quiero ser campeona olímpica

Llego al velódromo Reinaldo Passeiro y no es difícil encontrar a Marlies Mejías. Se desarrolla la Copa Cuba; y entre ciclistas de México, Venezuela, Colombia, Trinidad y Tobago y el país anfitrión rápidamente la localicé en el evento del ómnium, que a la postre ganó con récord para esa pista.

Ella y su bicicleta eran el show; su nombre y sus embalajes en la línea de sentencia, las delicias del público.

¿Cuándo montas bicicleta por primera vez?

Yo soy de Santiago de Cuba, más específicamente de Mayarí Arriba, allá ni siquiera había visto una bicicleta. Cuando me mudé con mi mamá para Güira de Melena, ahí por primera vez me monté en una. Un amigo de la familia me llevó a un área deportiva, después a la EIDE de Artemisa.

Cuéntame de tu familia, los vi coreándote desde las gradas

Mi familia me da fuerzas para continuar de solo pensar en ellos. A veces cuando me falta un poco para llegar a la meta, la imagen de ellos pasa por mi cabeza y eso como que me inyecta energías para seguir y hacerlo lo mejor que yo pueda. Aunque no estén en la pista, es muy sorprendente que puedan ayudarme solo con un pensamiento.

En cuanto a tus compañeras, alguna en particular…

Desde que yo estaba en la EIDE admiraba a Yoanka González. Entiendo que es la mejor ciclista que ha dado este país. Luego compartí equipo con ella y ha sido una experiencia maravillosa también por su personalidad, y los consejos. En el Panamericano de Ruta sentí un calambre en las piernas, Yoanka me ayudó a terminar la carrera y luego gané la medalla de oro.

¿Qué sueños te quedan por cumplir?  

Me quedan muchos sueños. Como ciclista quisiera llegar a ser campeona panamericana, olímpica, mundial.

¿Y en lo personal?

Quiero formar mi propia familia, pero todavía no es el momento. Tener un hijo lo cambia todo y no quisiera separarme de él para montar bicicleta, aunque quizás no competitivamente pero dejar la bicicleta a un lado no sé si podré algún día.
 

¿Cuál es tu mayor virtud?

La perseverancia, la voluntad de querer hacer las cosas lo mejor posible. Levantarte cada día y poner corazón en el ritmo de pedaleo eso es fundamental, no pueden faltarle a ningún ciclista ni a ninguna persona las ganas de continuar.

¿Qué le dices a los que están comenzando?

Les aconsejo que lo intenten, que no se cansen de intentarlo.