La Liga Superior de Baloncesto tiene un nuevo campeón: Capitalinos, equipo que este lunes, en su sede, cerró la final ante Los Búfalos de Ciego de Ávila con su cuarta victoria y pizarra de 68-63.

Desde el comienzo parecía que los habaneros pasearían la distancia al dominar el primer cuarto 16-14 y el segundo 19-13, sin embargo, los avileños reaccionaron en el tercero cuando fueron mejores (23-16) y se pusieron a un punto de quienes pretendían arrebatarles el trono.

Las tensiones se incrementaron en el último parcial, cuando el marcador tuvo dominio alterno, hasta que la balanza se inclinó favorable a los giraldillos por fallos en tiros libres de los avileños Yoan Luis Haití y Elmis Reyes, y dos pérdidas de balón rematadas por canastas azules de Orestes Torres y Yosmel Zequeira.

Ciego de Ávila buscó una última posesión de balón tras cometerle falta a Karel Guzmán, pero el talentoso jugador anotó dos libres, y con diferencia de cinco rayas el título quedó asegurado en La Habana.

En este choque decisivo, Orestes Torres llevó el mayor peso ofensivo por los campeones al marcar 16 tantos. Jasiel Rivero no tuvo tanta productividad como en choques anteriores, pero a la hora clave no falló y su defensa resultó decisiva.

Los ahora subtitulares tuvieron sus mejores cartas en Yasser Rodríguez y William Granda, con 16 y 14 puntos, en ese orden. Este elenco, ganador con anterioridad de ocho campeonatos, transitó por uno de sus peores torneos debido a lesiones de figuras fundamentales, más el lógico descenso de los más experimentados.

Ahora la provincia requiere buscar la recuperación en la salud de sus hombres clave, más el fortalecimiento del trabajo con los noveles, de manera que cuando llegue la hora, se produzca la necesaria renovación sin caer de los primeros niveles en el deporte de las canastas.

En cuanto a los nuevos monarcas, vale el reconocimiento por la constancia durante todo el torneo, la acertada dirección de Rainel Panfet y el progreso de varios jugadores, con énfasis en Jasiel Rivero, a quien se le puede considerar el mejor baloncestista del país.