USA: Trágica alegría de graduados universitarios

WalletHub, una institución que evalúa finanzas hogareñas, las caracterizó como aniquiladoras  del ingreso familiar.

Luego de explorar en sus 50 estados, colocó a la Florida en el lugar 38 de los más estropeados por esas obligaciones.

WalletHub opinó que, a continuación de las hipotecas, los préstamos estudiantiles universitarios son el mayor componente de las deudas caseras.

El Banco Central de Nueva York informó que, hasta junio último, su saldo total llegó a más de un millón de millones de dólares.

Un artículo bajo la firma de Richie Bernardo para WalletHub subraya  que, en solo 12 meses, la deuda  creció en 124 mil millones de dólares.

Esa misma fuente dice que, cuando estos graduados pasan al mercado laboral, no pueden garantizar su seguridad financiera.

De acuerdo a estadísticas, los estados con más daños al respecto son  Georgia, Maine y Rhode Island.

Observadores alertan que no se está en presencia de un hecho nuevo, y tienen absoluta razón.

Por ejemplo, empezaba 2014, el tres de enero, cuando el Institute for College & Success, con sede en California, difundió su reporte anual sobre tales deudas.

En su texto mencionó que 12 años antes, en 2002, esos graduados tenían una media a pagar que rondaba los 29 400 dólares.

La cifra entrañaba el 70 por ciento  del gasto por concepto de los estudios de su carrera universitaria.   
   

Una funcionaria del referido instituto, Debbie Cochrance, afirmó entonces:

“Ahora se gradúan y sufren graves dificultades para conseguir un trabajo que les permita abonar sus préstamos”.

Una emisora televisiva de Estados Unidos, la CNBC, informó a la vez que en ese país había unas 40 millones de personas con deudas originadas cuando eran alumnos.

Aún menos alejado, el 21 de septiembre último, la CNBC planteó que ahora encaran pagar un promedio de 26 000 dólares.

A manera de lapidaria sentencia, reveló: son siete millones que, sencillamente, “no pueden pagar sus préstamos”.

Otro interesante y muy controvertido espectáculo de la cada vez más ajada democracia estadounidense.