El gas pimienta resulta no sólo un recurso policial para dispersar a manifestantes en Estados Unidos sino también un instrumento para obtener las mejores ofertas en un comercial.

Este 'Viernes Negro' estadounidense, el día de las mayores ventas del año por las ofertas de los comerciantes, una mujer roció con gas pimienta a la multitud que hacía cola para comprar artículos electrónicos en un centro comercial en Los Ángeles.

Al menos 20 personas, entre ellas varios niños, sufrieron lesiones, informó la policía, que aún está buscando a la mujer que agredió a los clientes.

Los testigos contaron que los clientes derribaron pantallas de videojuegos, pisotearon carteles y se empujaron unos a otros para conseguir los mejores descuentos en los productos.

Pese al caos, esa sucursal de Wal-Mart permaneció abierta y quienes no se vieron afectados por el gas pimienta siguieron a la caza de gangas.

"No me importa", dijo Nakeasha Contreras, una joven de 20 años que llegó después del incidente. "Todavía estoy a tiempo de conseguir mi televisor".

En el estado de Carolina del Norte se ha registrado otro incidente. Dos hombres recurrieron a un arma de fuego para despejar el camino hacia el mostrador, según informaron las fuentes policiales de este estado norteamericano. Los dos hombres que dispararon están siendo buscados intensamente.

Además en Arizona, la Policía arrestó a un hombre de edad avanzada que intentó robar un juego para su nieto.

La Federación Nacional de Ventas al por Menor indicó que se espera que 152 millones de personas realicen compras durante el 'Viernes Negro'.

Mientras tanto, los activistas que apoyan el movimiento Ocupa Wall Street (OWS) instaron a declarar un "día sin compras" y así detener el consumismo como protesta por la política financiera global.

El organizador estudiantil de OWS Lucas Vázquez asegura que este boicoteo está dirigido a cambiar la cultura capitalista que a veces incluso ocasiona actos de agresión.

"El día 'Viernes negro' es un símbolo de la cultura en la que vivimos. Hay algunos heridos en este día porque la gente está dispuesta a matar a alguien que está a su lado para conseguir un material, algo que comprar. Eso demuestra cómo está esta cultura de comprar y comprar y olvidarse de los hermanos y hermanas de esta raza humana. Esto es lo que queremos lograr, cambiar esta cultura para que podamos pensar en la solidaridad y no en el consumismo que crean los bancos grandes", comentó a RT Vázquez.