Conociendo a los Ángeles: la fiebre juvenil de la música cubana (+ FOTOS)

Los Ángeles son ahora mismo los chicos lindos de la música cubana. No creo que haya muchos que refuten esa idea, incluso los que no comparten el género pop-house que ellos defienden en sus canciones. Tampoco espero que ellos mismos se opongan a este título ya que los tres integrantes del grupo (Jesús Ángel, Sian y Luis) saben cómo y cuándo mirarse al espejo, sonreír y salir al escenario a darle alegría a tanta gente joven que los espera para soñar y llenarse de felicidad.

En el último año estos jovencitos se han convertido en el centro de atención de los fans cubanos. El tema “Cuéntale a él” y sobre todo ese clip los catapultó al estrellato. Los adolescentes y jóvenes los reconocen en cualquier lugar, a donde quiera que llegan causan revuelo. Son imán para los lentes de cámaras y celulares. Todo el mundo quiere tener una foto, un poster firmado, o un beso de estos cantantes que son ya un fenómeno y que se sienten muy cubanos.

Son chicos que parecen estar contentos siempre, aun cuando es obvio que también tienen una vida cotidiana con problemas. “La gente va a vernos y espera encontrar lo que fueron a buscar, un bonito espectáculo con muchachos sin ojeras”. Uno de sus slogans es “Siempre di sí puedes, siempre di Ángeles”.

En este momento Ángeles compite en cuatro categorías en los premios Lucas con el clip “Te confieso”, aunque no se sienten satisfechos ya que esperaban otras nominaciones, como Mejor Dirección o Coreográfico. “El concepto de video clip es darle publicidad a un tema musical, a un disco. Aquí los grandes premios del clip recaen en obras que el jurado considera arte, no comercial”, comenta Jesús Ángel, director del grupo.

Actualmente los Ángeles están vinculados al proyecto “Queremos hablar de sexualidad” con el CENESEX, en el que intercambian con jóvenes sobre sus experiencias y sobre la importancia de la protección en las relaciones sexuales.

Además comenzarán a trabajar con la UNICEF como embajadores de buena voluntad y próximamente darán un concierto en Santiago de Cuba para conmemorar un aniversario de la creación de la Declaración de los Derechos del Niño.

“Nos sentimos identificados con esta causa, de hecho nosotros visitamos mucho hospitales de niños que quieren conocernos; nosotros vamos allí a darles un poco de alegría”, dice Jesús mientras nos muestra un video en su móvil de una niña enferma de cáncer, a quien le dedicaron un momento especial y exclusivo en su casa.

Jesús y Sian conversaron con Cubasí en el bar restaurante Bistró Habana-Kohly, donde recibieron el afecto de los empleados y no se escaparon de los autógrafos y las fotos con las muchachas del barrio.

El cómo lucen y su forma cálida y alegre nos hace deducir rápidamente por qué se llaman Ángeles, aun así quise preguntarles de dónde salió ese nombre.

Sian: Porque nos caímos del cielo. (Risas)

Jesús: En realidad estábamos en un estudio de grabaciones y mientras buscábamos el nombre del grupo pensamos en algo así como “Cupido”, que sonara romántico, hasta que nos decidimos por Los Ángeles de la Bachata. Luego fuimos incorporándole sentidos a ese nombre, como que mi segundo nombre es Ángel, que uno de los integrantes era de Los Ángeles (barrio de Marianao), que Luisito tenía cara de ángel… en fin.

Pero ustedes lo que hacen hoy es pop, house, fusión…

Jesús: En los inicios la bachata electrónica era el género que defendíamos. Somos arriesgados, cuando nosotros empezamos la bachata en Cuba no se cultivaba mucho. Y cuando salimos al escenario con los pinchos en los pelos parecíamos anacrónicos, pero así funcionó. Sian aún no estaba en el grupo.

¿Y abandonaron la bachata?

Jesús: No totalmente, pero ya no es la esencia del grupo. Somos multifacéticos, podemos hacer hoy una balada, mañana un merengue electrónico, y la base de nuestra música es el pop-house. Nos dimos cuenta de que el cubano es bailador, les gusta mover la cintura.

Con el tiempo hicimos un casting donde apareció Sian, me gustó como él encajaba con nosotros. Así ya Ángeles tenía una onda parecida a los Back Street Boys. (Risas)

¿Se inspiraron en los Back Street Boys?

Jesús: Sí, un poco, nosotros crecimos con ellos, con su estilo del pop. El público nos veía como esa banda de chicos jóvenes. El tema “Cuéntale a él” lo habíamos grabado en bachata, DJ Conds lo llevó a house, funcionó en el estreno y se quedó.

“Cuéntale a él” fue la catapulta de Ángeles, sobre todo por el clip que ganó Premio de la Popularidad el pasado año en los Lucas. ¿Ustedes lo ven así también?

Jesús: Sí, claro, fue el primer tema que nos marcó, que nos llevó al éxito, por decirlo de alguna manera. El destino estuvo de nuestra parte. Creo que el mismo público fue el que nos hizo crecer. Ellos necesitaban ídolos en la juventud y nosotros  fuimos parte de eso.

Cantamos en varios programas juveniles de televisión y la imagen que teníamos entonces no tenía que ver con la de hoy. Sí me di cuenta enseguida que el público veía en nosotros a los Back Street Boys.

¿No te molestaba eso?

Jesús: No. No digo que nos viera como una copia sino como un grupo de jóvenes. A partir de ahí comenzamos a acercarnos a la imagen que tenemos hoy. A los jovencitos les gustó nuestro espectáculo.

Los jóvenes y adolescentes son sus principales seguidores. ¿Fue ese el público que se propusieron cuando iniciaron su proyecto musical?

Sian y Jesús: En realidad, no. De eso nos percatamos después. El resultado del producto no se ve al momento. Los niños y adolescentes nos escogieron espontáneamente. Además de las canciones de Liuba María Hevia y otros cantautores el público infantil no tenía una banda a la que seguir.

¿Es una coincidencia que los tres integrantes de Ángeles sean tan jóvenes y lindos o fue así como concibieron la imagen del grupo?

Jesús: Inicialmente no fue así. Además el grupo ha cambiado. Sian no estaba y en su lugar había otro integrante.

Sian: yo estaba estudiando actuación en la ENA y no tenía nada que ver con el canto. Incursioné con Osmani García, el reguetonero, pero todo quedó ahí. Luego DJ Conds me sugirió que me presentara a la audición con Ángeles y les gusté. Cuando yo vi a Jesús y a Luisito llenos de músculos me sentí como el niño del grupo, yo estaba todo flaco. (Risas). Además yo tenía solo 18 años y ya ellos contaban con más de 20.

¿Entonces Sian dejó la carrera de actor?

Sian: No totalmente, pero he tenido que priorizar. En diciembre debe iniciarse la pre filmación de una película de Santana. Son varias historias y yo soy uno de los protagonistas. Puedo hacerlo porque no es un trabajo largo, pero he tenido que rechazar personajes en telenovelas porque me toman meses de filmación que la música no me permite.

Jesús: lo que pasa es que nuestro grupo está en un momento de la carrera en que se exige mucho trabajo, es lo que toca ahora.

Sian no estudió canto, y los demás Ángeles tampoco. ¿De dónde salió la idea de hacer música?

Jesús: Ángeles salió de la calle. Desde pequeño mi mama me apuntó en cuanto curso de arte había: teatro, baile, canto, circo… Cuando comencé el tecnológico en Telecomunicaciones me alejé un poco de ese mundo, pero luego fui parte de varios grupos musicales, incluso dejé la universidad en el último año.

Una de las cosas por las que Ángeles llama tanto la atención es por su estética de pelos con pinchos. ¿Cuán importante es la imagen para ustedes?

Jesús: Nos dejamos crecer los pinchos cada uno poco a poco casi de casualidad hasta que nos dimos cuenta de que funcionaba bien en conjunto. Para nosotros la imagen es lo más importante. Diría que ocupa un 70 u 80 porciento.

¿Y el resto?

Jesús: El resto es el espacio que ocupa la música y el espectáculo.

Sian: Creo que la mayoría de los artistas le deben casi todo a su imagen. Vamos a estar claros, Justin Bieber no se pegó solo por cantar. A la gente lo que le gustó fue ver un niño de 16 años con pelo de bebé, cantando y bailando. Con nosotros sucede lo mismo, la gente en la calle tararea la canción, conocen el ritmo, pero no saben la letra, en cambio nos identifican como “los de los pinchos”.

Jesús: Cuando el disco se pegó en el público entonces sí sabían quienes éramos. La imagen ayudó.

¿Se consideran seguidores de la moda?

Sian y Jesús: Pudiéramos decir que sí. Sobre todo con el representante que tenemos ahora: Aniel. Él es nuestro fashonista.

Sian y Jesús: Lo que no nos gusta es que nos traten como producto. A veces la gente dice: “Tírense la foto con ellos porque están hechos para eso”. Somos personas, no objetos. Nos sentimos bien con que los niños y sus padres nos vean como algo sano, que escuchen nuestra música cuando salgan de la escuela y que no ocupen el tiempo en pensar en adicciones.

¿Creen que ese espíritu sano es lo que trasmite la música de ustedes?

Sian: Hace un tiempo hicimos un tema con un reguetonero, se llama “Loco como un demente” y finalmente le quitamos una frase que decía algo así como “me enamoro y me pierdo por ti, si no te tengo a mi lado me da por fumar y tomar como un loco demente”. Lo cambiamos aunque no tenía un sentido fuerte ni era una incitación a los vicios.

Jesús: Ya que estamos hablando de letras, quisiera contar sobre nuestra experiencia con una muchacha que es ciega. A ella le gustan los Ángeles, no por su físico, porque no puede vernos, sino por nuestra música. Ella siente lo mismo que otras seguidoras que sí nos ven. Eso es lo que nos da la idea que en nuestro proyecto música e imagen están acopladas.

¿Qué idea tienen ustedes, entonces, del arte y el público?

Jesús: La idea es que debemos trasmitir cosas positivas. No es momento de llorar sino de sentir alegría, motivación, apoyo. Mientras tengamos fuerzas seguiremos haciendo cosas lindas. Queremos que todo lo que hagamos tenga un impacto en la gente.

¿Qué les gusta hacer en su tiempo libre, lo pasan juntos?

Sian: Casi siempre estamos juntos. No hay mucho tiempo libre. Nuestra rutina es levantarse, ensayar e ir a los conciertos, que son varios días en la semana. Nuestros pasatiempos son jugar a los bolos, squash, ver películas o series y los mangas japoneses.

Jesús: Yo en particular paso tiempo con mis niños, tengo dos, y Luisito también. Los míos tienen 3 y 5 años. Al mayor no le interesa mucho el grupo, pero el más pequeño me pide que le ponga los Ángeles de música.

¿Vas a la escuela de tus hijos, a las reuniones de padres?

Jesús: No, va la mamá. Imagínate, la escuela se iría abajo. (Risas) No son solo los estudiantes, las mamás también nos siguen.

¿Tantas chicas detrás de ustedes los afectan para tener una relación seria de pareja?

Jesús: Eso depende, hay quienes son más sueltos, pero uno debe darse a respetar. El mundo de la música es cruel. La madre de mis hijos y yo estamos separados hace más de un año. Este oficio nos exige mucho tiempo, y todo el mundo no lo comprende, a no ser que tu pareja sea una bailarina o actriz, alguien del mismo medio nuestro.

Sian: Lo importante es que quien esté a nuestro lado sea comprensiva, porque a veces las muchachas en los conciertos se nos acercan demasiado y hasta nos besan, nosotros no tenemos culpa de eso, no lo buscamos.

Volviendo a la parte musical, háblennos de sus discos, que son varios

Jesús: El primero lo grabamos de forma independiente. Fueron unos 15 temas. Luego hicimos otro, también independiente, que contenía varios remix como el que tenemos con Yuly & Habana C y otro con la cantante Arlenys Rodríguez. El tercer CD “Buscando ángeles” tuvo una docena de tracks, y en él compartimos con compositores como Osmani Espinosa y Jesse Suárez.

¿Estos discos independientes fueron licenciados por alguna disquera cubana?

Jesús: No. Fue un mal trabajo por parte de nosotros y de las disqueras. Ahora con Bis Music hacemos un compilatorio “Ángeles tocando el cielo”. Debe salir un segundo álbum de este tipo. Además grabamos un DVD, también con Bis Music de un concierto que hicimos el 20 de agosto, en el coliseo de la Ciudad Deportiva.

¿Han pensado en una gira nacional?

Sian: Hemos cantado en toda Cuba, pero no hemos organizado una gira como tal. Sí nos gustaría hacerla.

Jesús: Les daré una primicia, vamos a hacer una gira con Lucas, ya que nuestra carrera ha estado siempre unida a este proyecto del video clip. También daremos nuestro primer concierto en solitario en el teatro Karl Marx los días 13, 14 y 15 de diciembre próximo. Es un reto llenar ese teatro, pero tenemos muchas expectativas.