Concluye en Cuba evento sobre retos sociales frente a corrupción

Delegados de 20 países debatirán hoy aquí sobre el impacto de la crisis financiera, el neoliberalismo y la corrupción en la sociedad actual, durante la última jornada de un encuentro internacional sobre el tema con sede en la capital cubana.

Para los participantes en el V Encuentro internacional sobre la sociedad y sus retos contra la corrupción, el enfrentamiento a esa problemática requiere de un análisis serio acerca de la realidad sistémica en el ámbito económico y político.

Los debates de este viernes estarán a cargo de especialistas de México, Argentina, Venezuela y el país anfitrión.

Antonio Mazittelli, representante regional para México, Centroamérica y el Caribe de la Oficina de la Organización de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, señaló que la cita propició un fructífero intercambio de experiencias.

Por su parte, el auditor de la Cámara de Cuentas de Rusia Alexander Zhdankov señaló ayer durante una intervención especial que en los últimos años su país ha hecho mucho para resolver ese problema.

Al respecto, aludió a la aprobación de un plan y una estrategia nacional que incluyen las direcciones principales de la política anticorrupción, y a un gran paquete de leyes que se complementan.

El funcionario refirió que en Rusia la resolución de estas tareas ha tenido un carácter sistémico, pues participan instancias como el Consejo del Presidente de la Federación, la Procuraduría General y el Órgano Federal de Poder.

En la sesión inaugural el pasado miércoles, el Fiscal General de la República de Cuba, Darío Delgado, ratificó la voluntad de su país de continuar luchando contra la corrupción y enfatizó que ese fenómeno requiere un enfrentamiento organizado.

Consideró que el combate a ese mal necesita la participación de todos y una política preventiva y penal coherente para dar respuesta a las variables y crecientes manifestaciones que está teniendo en los tiempos actuales.

Mientras, la contralora general cubana, Gladys Bejerano, abogó por la promoción de una mayor participación ciudadana en la supervisión de la administración pública.

La reunión, con sede en el capitalino Palacio de Convenciones, acoge a más de 350 delegados de 20 países de América, Europa y África.