De Fortún a un relevo de leyenda

Guadalajara.- Lejos, pero vivas están las tardes del 27 de febrero de 1951 y el 28 de julio del 2007, fechas en las que Cuba conquistó la primera y última medalla de oro, respectivamente en Juegos Panamericanos, ambas en atletismo, por intermedio de Rafael Fortún y el relevo 4x400 femenino.

En la cita inaugural de Buenos Aires, el bólido Fortún fue la figura más destacada en el Estadio Olímpico con dos títulos, el primer de ellos en 100 metros, cuando en poco más de una decena de segundos relegó al segundo lugar al estadounidense Arthur Bragg. Las piernas del camagüeyano inauguraron nuestros éxitos en estas citas continentales. Y todavía corremos con él...

Luego vendrían desempeños sumamente discretos en las ediciones de México 1955 y Chicago 1959, donde apenas conseguimos tres doradas entre ambas. El triunfo de la Revolución abrió el espacio real y merecido de la actividad del músculo en la Isla. Cuatro oros en Sao Paulo1963 y ocho en Winnipeg1967 auguraron el salto definitivo en Cali1971.

En la cita colombiana escalamos por vez primera y para siempre el segundo puesto por países. Otra vez el atletismo llevó la voz suprema con el triplista Pedro Pérez Dueñas, primer recordista mundial en estas confrontaciones con salto de 17,40 metros, sin dudas, la  noticia más trascendental de aquellos Juegos.

Cuatro años más tarde, en 1975, México organizó por segunda ocasión estos encuentros de América y Cuba sumó el primer centenar de campeones, mientras en Caracas1983 superamos la barrera histórica de 200 doradas.

De regocijo y en casa propia, en La Habana1991, los premios se dispararon hasta 140 títulos, tope que permitió desplazar del trono en la tabla final, por única vez en la historia, a Estados Unidos. La fiesta no creyó en pronóstico y sí en la voluntad y entrega de sus deportistas con su pueblo. ¡Increíbles, superlativos y fascinantes aquellos días!

Sin embargo, ahora que se aproxima la XVI edición, nada mejor que recordar también la última corona, la 782 para Cuba desde su primera participación en la capital argentina, conquistada por las veloces piernas de Aymeé  Martínez, Daimí Pernía, Zulia Calatayud e Indira Terrero en el estadio Joao Havelange, de Río de Janeiro, al imponerse en el relevo largo que puso punto final a las competencias atléticas de esa tarde noche.

El Festival del deporte y la amistad en América está a punto de celebrar su dieciséis cumpleaños del 14 al 30 de octubre. Cuba, erguida y segura, pretende justificar su presencia en Guadalaara con una delegación victoriosa y digna, en la que el ejemplo de Fortún y de esas últimas muchachas está presente en pos no solo de nuevos cetros e inmensas alegrías, sino también del recuerdo agradecido y honorable que siempre ofrece la historia.