El descendiente del excapitán del Ejército abogó este jueves por instaurar un régimen militar si la situación llega a ser igual que a finales de la década de 1960.

Hizo alusión en la red social Twitter al Acto Institucional Número Cinco (AI-5), que daba poderes extraordinarios al presidente de la República y suspendía garantías constitucionales durante la etapa más oscura y represiva de la dictadura castrense.

Insistió en que si la izquierda se radicaliza hasta ese punto tendremos que dar una respuesta.

Ante tal aberrante declaración, los partidos opositores, en particular el de los Trabajadores (PT), también solicitarán la destitución de Eduardo del Consejo de Ética de la Cámara por incumplimiento del decoro parlamentario.

Otros representantes de varias instituciones rechazaron además tal insinuación que muestra el desprecio de la familia Bolsonaro por la democracia.

'La declaración de Eduardo Bolsonaro es criminal, contra la Constitución y la democracia. Ya pronunció un discurso en este sentido y ahora está abriendo su posición. Más que la oposición, los alcaldes, el Senado y el STF deben reaccionar. Necesitamos garantizar la democracia que estamos construyendo', afirmó la presidenta del PT, Gleisi Hoffmann.

El Colegio de Abogados de Brasil (OAB) indicó en un comunicado que la expresión de legislador constituye una afrenta a la Constitución.

'La manifestación del diputado, líder del partido del presidente de la República, es extremadamente grave. Es una afrenta a la Constitución, al Estado de Derecho democrático y un coqueteo inaceptable con los ejemplos fascistas y un pasado de arbitrio, censura de prensa, tortura y falta de libertad', alertó el OAB.

Por su parte el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien cumple prisión política desde abril de 2018, escribió en Twitter que 'Brasil necesita más democracia, no menos.

Bolsonaro tiene que actuar como presidente y respetar al pueblo brasileño. No necesita estar de acuerdo conmigo, tiene que respetar democráticamente las opiniones de todos'.