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No es lo mismo la infracción de Robben que la de Luisito. La primera está en el juego como recurso mañoso y sancionable, y antideportivo, dentro de este, incluso con Roja directa si es preciso, y la segunda es antideportiva y con reiteración y caso omiso del infractor que no valoró que significaba él para su país. Me pregunto, para qué tanto despliegue tecnológico con cámaras y cámaras y videos y más vídeos si los arbitrios no acuden a nada para decidir en los casos que se amerite hacerlo sin quitarle la autoridad del partido. Realmente debe haber una sanción para este árbitro, que claro no reparará el mal causado pues no será invalidado el gol ni el juego. Y Latinoamérica se quedó con un equipo menos y a esperar otros cuatro años. El mundo entero vio que se tiró a la piscina pero este árbitro no lo vio, ni tuvo en cuenta la protesta de los jugadores, ni apeló a la sensatez sabiendo lo que estaba en juego en ese partido. También es cierto que no le cantó penal anteriormente al mismo jugador y que existió pero los errores no se compensan ni se rectifican de esa manera tan errónea y costosa. Si hay chovinismo o cualquier otra cosa, la FIFA lo debe esclarecer y tomar medidas también porque no es justo que pasen esas cosas. Tampoco deben existir dobles raseros para aplicar los reglamentos.