Noboa, entre golpes de Estado

Recuerdo que hace año y medio, el expresidente Rafael Correa brindó todo su apoyo al actual mandatario de Ecuador, Daniel Noboa, ante la posibilidad de un golpe de Estado que estaba fraguando la creciente delincuencia organizada con el fin de impedir cualquier obstáculo al lucrativo negocio del narcotráfico y otras trapisondas que la desidia de las autoridades neoliberales no logra atajar.

En aquel entonces, Correa, reconocido líder político, ofreció un respaldo total al presidente Noboa, instándolo a no ceder ante las adversidades:

“Presidente Daniel Noboa, tenga todo nuestro total respaldo. Por favor, no vaya a ceder y cometa cualquier error. Nuestras discrepancias políticas las discutiremos al día siguiente de la victoria. ¡La patria nuevamente vencerá!”.

No solo Noboa no agradeció el apoyo del mandatario que desarrolló para bien a Ecuador con sus diez años de Revolución Ciudadana, sino que mintió groseramente al achacar tal delincuencia a los años de gobernanza del correismo.

Ahora se repite la situación, pero al revés: Correa alertó que Noboa, al negarse a tomar licencia durante la campaña electoral, prepara un autogolpe con el fin de evitar una posible derrota en las venideras elecciones presidenciales, algo que hace dos meses había pronosticado la vicepresidenta Verónica Abad, sustituida anticonstitucionalmente por el archimillonario en el poder.

“Las mentiras y las trampas han destruido al país”, aseveró Correa, citado por el medio Fusar News, al referirse a la acción de Daniel Noboa de no cumplir con lo establecido en la Constitución de Ecuador, lo cual llevaría a un eventual golpe de Estado.

Correa también se refirió a un comunicado del movimiento Acción Democrática Nacional (ADN, centroderecha), que justificó la postura del actual jefe de Estado.

La publicación de ADN afirma que, según el artículo 93 del Código de la Democracia, solo los funcionarios que buscan la reelección inmediata tomarán licencia. Asimismo, menciona que, por llegar a la presidencia, luego de elecciones anticipadas, no se trataría de una reelección.

Cabe destacar que esa situación generó un intenso debate jurídico y político en el país suramericano, en el que juristas advirtieron sobre la posibilidad de un juicio político contra Noboa, en caso de que persista en su negativa.

En cuanto al Consejo Nacional Electoral (CNE), realizó un pronunciamiento en contra de una solicitud para que el organismo aclare la situación, lo cual causa incertidumbre en el proceso electoral.

HIJO… DEL GOLPE

También hay que recordar que el propio Noboa surgió de un disfrazado golpe orquestado por el también millonario Guillermo Lasso, dando vida a lo que denominan “muerte cruzada”, renunciando así a la primera magistratura y evitando el juicio político que se le avecinaba por sus malos manejos  políticos y económicos.

La "muerte cruzada" es contemplada como una medida de emergencia que consiste en la terminación anticipada del periodo de funciones de los titulares de los poderes ejecutivo y legislativo. Es así como el jefe de Estado tiene potestad para disolver la Asamblea en caso de “grave crisis política” y “conmoción interna” en Ecuador, con un posterior llamado a elecciones".

Todo esto en  medio del control de la delincuencia de una parte del país, con abusos de todo tipo por las mal llamadas fuerzas del orden, o integradas por individuos sin escrúpulos en gran parte que son cómplices de los narcotraficantes y reprimen las manifestaciones de protesta social.

El abuso ha sido tal que llevó recientemente al secuestro y asesinato por miembros de la fuerza aérea de cuatro menores de edad que jugaban fútbol, cuyas cuerpos fueron calcinados y enterrados en las inmediaciones de una base militar. 

DESMANTELAMIENTO DEL ESTADO

La crisis que vive Ecuador es producto de lo que diferentes gobiernos sembraron por años y del desmantelamiento del Estado, agravado hoy por un mandatario sin preparación y aupado por una oligarquía extremadamente rica y en la cual su familia tiene el puesto cimero.

El grupo que dice gobernar recibe ahora el resultado de años de destrucción, de persecución política, donde se olvidó el bien común de administrar el Estado.

Hoy Ecuador se encuentra en un virtual estado de guerra con acciones violentas protagonizadas por bandas del crimen organizado que llevó a declarar el conflicto armado interno a un presidente que quiere mantenerse en el poder a toda costa.