Estados Unidos: Vivos que envidiarán a los muertos

El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, criticó varias veces lo dicho por Trump respecto a su autoridad total para reabrir la economía.

Ello se ejecutaría antes de controlarse la crisis sanitaria y agregó que un Presidente no es un monarca absoluto.

Trump le ripostó con tono sarcástico, “sí lo es, me declaro rey”.

Hizo tal pronunciamiento durante un encuentro en la Casa Blanca sobre el coronavirus.

Y a continuación manifestó, “le dimos a Cuomo 2900 camas de hospital, y un barco, pero no lo utilizó, refiriéndose al centro de salud federal y al barco  USNS Comfort.

“No tenemos un rey”, había dicho el gobernador demócrata  horas antes en el programa “Today”, de NBC.

Luego recordó, George Washington fue presidente,  no Rey.

Cuomo  reaccionaba  a una frase de Trump, “cuando alguien es presidente de Estados Unidos, la autoridad es total”. 

Luego ante una interrogante en el programa “New Day”, de la CNN, (¿qué haría si Donald Trump le ordenara reabrir la economía de Nueva York?) Cuomo respondió serenamente, “no lo haría”.

A renglón seguido puntualizó, tendríamos un desafío constitucional, y eso iría a los tribunales.

Horas después reiteró sus críticas al presidente en la sesión informativa diaria, también reportada por Fox News. 

¿Motivo del nuevo exabrupto de Trump?

La virtual rebelión de Gobernadores en ambas costas del país enfilada a crear pactos en medio de la pandemia global.

Reiteradas críticas del demócrata Cuomo a Trump llevaron a que este último declarara:

“Hablaré con los 50 gobernadores muy pronto, y luego autorizaré que cada uno implemente una reapertura”.

En su opinión, el día está cerca, e indicó que algunos estados sin brotes importantes abrirían antes del primero de mayo.

 “Algunos (gobernadores) pueden salir muy, muy pronto (de la cuarentena). Y esperamos ver ese proceso. Creo que va a ser un proceso muy hermoso”.

Todo, cuando Estados Unidos reporta ya miles de fallecidos, cifras récord de infectados y ciudades con aspectos surrealistas.

Mientras en destartalados hospitales, cada vez más, los vivos envidiarán  a los muertos.