Un director o un cambio en la gestión del Cuba de béisbol

especiales

Un director o un cambio en la gestión del Cuba de béisbol
Fecha de publicación: 
5 Mayo 2025
0
Imagen principal: 

Casi todos los días me hacen dos o tres veces la misma pregunta: ¿quién será el próximo director del equipo Cuba de béisbol? Y yo respondo con el mismo ademán: me encojo de hombros y abro los ojos como dos toronjas.

La lista de candidatos crece un día y otro se reduce, con nombres que van desde el experimentado Alfonso Urquiola hasta algunos, en realidad muy pocos, que hoy están dirigiendo en los campeonatos nacionales.

En redes sociales digitales se han realizado encuestas con varias opciones y en las polémicas populares el tema del relevo de Armando Johnson al frente de la selección acapara la misma cantidad o más titulares que la inminente postemporada de la Liga Élite.

La expectativa aumenta en la medida que la mayoría de los países que competirán en el próximo Clásico Mundial ya han anunciado los cuerpos técnicos o al menos el timonel.

Los resultados de Cuba en los últimos eventos internacionales resultan el argumento fundamental de quienes piden un cambio radical en la dirección del equipo, que implique, más allá de nombres, un nuevo enfoque en la gestión de la plantilla.

Incluso, muchos consideran que en dependencia del elegido será el éxito en la convocatoria de jugadores profesionales, a pesar de la campaña mediática y de hostigamiento de quienes disfrutan las derrotas del elenco insular.

Existe coincidencia en la necesidad de una dirección que aplique la ciencia y tecnologías de avanzada tanto para la conformación del equipo, como para su puesta en forma y después en el manejo de los partidos.

Afortunadamente, Cuba dispone aún de técnicos capaces de innovar con rigor científico, que podrían articularse con otros de mucha experiencia para armar un sólido staff.

La opción de Urquiola para liderar ese grupo de entrenadores genera consenso, que en temas beisboleros es casi una utopía en esta Isla.

Además de prestigio, autoridad y una hoja de servicios que lo consagran entre los mejores directores de los últimos años, Alfonso Urquiola es de esos hombres que viven para el béisbol y quiere, en palabras suyas, morirse dentro de un terreno de pelota.

Hay más candidatos, entre ellos el actual coach de banca de la selección, Germán Mesa, sobre quien pesa, no obstante, tener también responsabilidad en los desenlaces desafortunados del Cuba en recientes competencias.

Al anunciarse el cese de Johnson, el nombre del holguinero Noelvis González figuró en casi todas las listas, dado su dominio y aplicación de la sabermetría y otras virtudes que lo conectaban con la aspiración de novedad en la dirección del elenco.

Su propuesta también dejó gratas sensaciones en los debates populares y de la prensa especializada, e incluso trascendió que Noelvis comenzó a diseñar una estrategia para no empezar de cero en caso de ser convocado.

No faltan en el escalafón popular los tuneros Pablo Civil y Abeisy Pantoja, ambos campeones nacionales y el Doctor en Ciencias Ángel Ortega, quien dirige actualmente a los Alazanes de Granma.

A diferencia de otras épocas, la demora en la designación deja entrever la ausencia de una cantera abundante y la necesidad de instrumentar un programa académico para la formación de entrenadores de béisbol.

Lamentablemente, existen potenciales estrategas que están asumiendo responsabilidades hoy sin los conocimientos necesarios, y el empirismo y espontaneidad les pasa factura a la hora de tomar decisiones. 

Me sumo a quienes prefieren interpretar la demora en la designación del timonel del Cuba como una oportunidad para valorar, en vez de nombres, la estrategia; con el enfoque no en quién, sino en qué necesita la selección para cambiar su imagen internacional y después entonces escoger el candidato que se ajuste a ese proyecto renovador.

Añadir nuevo comentario

CAPTCHA
Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.
CAPTCHA de imagen
Introduzca los caracteres mostrados en la imagen.