Al menos siete personas resultaron heridas anoche durante la violenta protesta de Rotterdam, Países Bajos, contra las restricciones por el rebrote de Covid-19, que incluyó ataques a la policía y la dura respuesta de los uniformados.

Según informes de la prensa local, además de las dos personas heridas tras los disparos de advertencia efectuados por la policía, otras cinco personas resultaron con lesiones.

La cadena BBC británica informa que al menos 20 personas fueron detenidas durante una noche que el alcalde de la ciudad, Ahmed Aboutaleb, definió como "una orgía de violencia".

Aboutaleb dijo a los periodistas en la madrugada del sábado que "en varias ocasiones la policía sintió la necesidad de sacar sus armas para defenderse" mientras los alborotadores arrasaban el distrito comercial, iniciando incendios y destrozando el mobiliario urbano, e incluso vidrieras y automóviles.

"Le dispararon a los manifestantes. La gente resultó herida", admitió Aboutaleb.

Varios agentes resultaron heridos en la violencia. La policía esperaba arrestar a más personas después de estudiar las imágenes de video de las cámaras de seguridad.

Las fotos de la prensa local mostraron al menos un coche de policía en llamas y otro con una bicicleta incrustada en el parabrisas. La policía dijo que las autoridades de la ciudad habían cerrado la principal estación de trenes de la ciudad.

La arremetida de la policía antidisturbios y el uso de cañones de agua sofocaron los disturbios después de la medianoche.

La restauración del cierre parcial ante el avances de los contagios del pasado sábado desató la protesta de cientos de personas que se concentraron en el centro de Rotterdam.

Muchos de ellos, gritando "libertad", "libertad", encendieron fuegos artificiales y los arrojaron a los policías, junto con otros objetos contundentes.

Ante los hechos de Rotterdam, una manifestación contra las medidas de sanitarias programada para hoy en Amsterdam fue cancelada, anunció la organización en Facebook.

"El infierno se desató en Rotterdam anoche", mantener la manifestación en Amsterdam "no parecía correcto", dijo United We Stand Europe, denunciando las heridas de dos manifestantes.

El ministro de justicia neerlandés, Ferd Grapperhaus, condenó los hechos. "Es repugnante ver los disturbios y la violencia extrema contra los agentes de policía, la policía antidisturbios y los bomberos anoche en Rotterdam", dijo en un comunicado.

"Protestar es un gran derecho en nuestra sociedad, pero lo que vimos anoche es simplemente un comportamiento criminal. No tiene nada que ver con la demostración", acotó.

Según The Guardian, se ha abierto una investigación independiente sobre los tiroteos por parte de la policía, como es el caso cada vez que los agentes usan sus armas.

El partido político local Leefbaar Rotterdam condenó la violencia.

"El centro de nuestra hermosa ciudad se ha transformado esta noche en una zona de guerra", dijo en Twitter. "Rotterdam es una ciudad en la que puedes estar en desacuerdo con las cosas que suceden, pero la violencia nunca, nunca es la solución", completó el mensaje.

Las movilizaciones son en respuesta a las nuevas medidas anunciadas por el gobierno neerlandés para hacer frente a un rebrote de la epidemia. Ayer se registraron en el país 23.591 nuevos casos y 34 muertes por el coronavirus.