OPINIÓN: Mbappé, excepcional en Qatar 2022, pero tendrá que esperar

Kylian Mbappé ambicionaba ya colocarse la corona como Rey del más universal de los deportes, pero Lionel Messi lo puso en lista de espera.

El delantero francés luchó con todas sus fuerzas en la Copa Mundial de Qatar 2022 para coronarse por segunda vez con solamente 23 años, y mira que lo mereció, pero un excepcional Messi y una disciplinada y comprometida Argentina le pusieron freno.

Era una final que francamente merecía dos campeones, pero solo uno podía levantar la Copa, y esa fue la selección albiceleste, luego de una tanda de paneles en las que estuvieron realmente imperiales.

Colectivamente no hubo dos ganadores, pero individualmente sí, porque independientemente del reinado incuestionable del genio de Rosario, el galo firmó un partido memorable y pasará a la historia como el único (no creo que jamás se repita esto) capaz de marcar tres veces y regresar a casa derrotado.

De hecho, solamente otro futbolista en casi 100 años de historia hizo un hat-trick en una final, el inglés Geoffrey Hurst en aquella polémica de 1966. Ni siquiera figuras míticas como Pelé, Ronaldo, Maradona, Zidane o el propio Messi lo consiguieron.

Lo de Mbappé fue evidentemente descomunal, y más porque sus tantos significaron que Francia volviera a un choque en el que estuvo desaparecida 70 minutos. Todo comenzó con las tempranas sustituciones de Olivier Giroud y Ousmane Dembelé al minuto 41, primera vez en la historia de las finales que un mismo equipo cambia a dos jugadores sin que haya lesión de por medio antes del cierre del primer tiempo.

El empuje de los europeos y el bajón físico de los suramericanos se combinaron para dar la disputa del trono más entretenida vista jamás.

Pero lo de Mbappé no tenía parangón. Con su escasa edad se echó al equipo encima y no solo marcó los tres tantos de los suyos (dos de penalti) sino que tomó la pelota y pateó el primero en la definición por penales, y lo hizo de manera impecable.

O sea, que en un mismo partido batió tres veces a Emiliano Martínez, un auténtico parapenales. Está claro que mucho trabajó el chico en este aspecto, porque no olvidemos que un fallo suyo desde los 12 pasos fue el que sacó a Francia en la Eurocopa del pasado año.

La progresión del goleador es espectacular y no se sabe hasta dónde puede llegar, pero el freno que le puso Messi ahora lo tendrá en lista de espera al menos hasta que gane una Liga de Campeones, su gran asignatura pendiente. También a diferencia de Leo, que era un demonio corriendo y siguió siendo determinante cuando por edad bajó su velocidad, Mbappé depende básicamente de su cambio de ritmo, además de su letal definición. Por eso este “retraso” puede pasarle factura en la lucha por entrar al Olimpo futbolero para poder sentarse a la mesa con los mencionados más arriba.

En cualquier caso, tendrá que esperar, y sobre todo encandilar mucho más todavía para heredar el trono.