Luis Franco: Un Sí musical y renovado

El joven cantautor cubano Luis Franco, estrenó recientemente su segunda producción discográfica. Bajo el título “Sí” y el sello discográfico Egrem, Luis nos invita a una nueva visión de su trabajo, aunque sin renunciar a ciertas esencias:

“Yo le decía al productor que quiero ser un cantautor moderno, no quiero ser el cantautor ahí sentado con la guitarra, quiero moverme arriba del escenario y, por supuesto, también jugar con la esencia mía, porque como músico, como cantautor, también yo tengo una esencia que es la de la palabra, a mí me gusta decir en mis canciones cosas que a ti te llamen la atención, aunque hoy tu escuches el disco por primera vez y no sea lo primero que te llame la atención, pero la manera de decir que yo tengo es lo que marca más el sello”.

De hecho, al decir de la musicóloga Heidi González, quien acompañó desde Egrem la producción del segundo fonograma de Luis Franco, “el cambio en el discurso llega también gracias a la mano, al toque mágico de un joven productor: Leonardo Gil. Creo que fue muy importante su mano dentro de este disco, es decir, Luis cuando se dio a la tarea de emprender este nuevo disco tenía muy claro el enfoque musical que quería tener, la manera de cómo quería que sonara, cosa que es bien importante para un artista, tener muy claro lo que quiere y, por supuesto, seleccionar a la persona adecuada para poderlo llevar a cabo y de esta manera fue que apareció Leo en esta historia”.

Novedad le pidió Luis Franco y Leonardo asumió el desafío: “Hoy en día innovar es muy difícil, hacer un disco y decir esto es una innovación completamente, es muy complicado, pero trabajar en un disco donde tú digas, quiero hacer un disco muy influenciado, que tenga mucha fusión, que sea contemporáneo, que sea fresco, también es un reto, es un tremendo reto porque hay muchos artistas que están haciendo este tipo de música también y tener un discurso nuevo es lo más importante y creo que Luis lo tiene, Luis tiene un sello, sus melodías principalmente, sus letras, siempre tienen un algo ahí que es muy de él, es muy Luis Franco”.

El joven pianista, productor, compositor y arreglista, se convirtió entonces, al mismo tiempo, en retado y retador, así lo reconoce el propio Franco: “… eso sí siempre buscó Leo, tratar de ponerme a mí al límite de lo que yo podía hacer desde el punto de vista musical, por lo menos ahora. Yo llegué hasta donde estaba él y le dije: yo quiero evolucionar, yo no quiero el disco de banda, la batería el bajo, el piano y él me dijo pues perfecto, entonces vamos a poner adornos electrónicos, vamos a usar más programación y a veces, eso es un camino peligroso, porque entonces después sacas el disco, muy diferente, sí, desde el punto de vista musical, muy electrónico, pero tienes un público que te empezó a seguir por Que no me faltes (mi primer disco), y ahora le estás entregando otra cosa…”

Un disco construido por Whatsapp

Así nos lo cuentan los protagonistas, pues casi todo ocurrió en medio del confinamiento por la pandemia de Covid 19. Sin embargo, app por medio, ocurrió debate, trabajo de mesa, desencuentros y mucha empatía entre autor, productor e ingeniero de sonido: “Yo pienso que el disco se  fue construyendo poquito a poco, no solo en cuanto a música y a canciones, sino como todos nosotros nos fuimos conectando con el disco”, reconoció Luis Franco.

“Luis Franco es una persona espectacular, trabajar con él es súper fácil, es muy, muy exigente, pero a la vez te da mucha ala para sin ningún problema enseñarle tus propuestas y decirle además, encima de su tema, cosas que pueden parecer atrevidas para un compositor, porque casi siempre uno cubre mucho su obra, la protege, pero Luis es una persona encantadora, muy serio, muy concentrado, sabe muy bien lo que quiere y por eso creo que funcionó”, afirma Leonardo.

Sobre Luis Durán, quien hizo la mezcla y masterización, comentó: “no es un sonidista que hace su trabajo y ya, no, es un sonidista muy inteligente, que te propone musicalmente en la mezcla muchísimas cosas. Fue muy interesante trabajar con un profesional que realmente tiene muchísima experiencia, sabiduría y disfruta lo que hace”.

Bien acompañado

Luis Franco no estaba seguro de hacer colaboraciones para este disco, pero cuando se decidió las pensó en grande. Sobre los excelentes músicos ue lo acompañan también comentó a la prensa:

“Alexander Abreu estaba de gira por Europa, le mandamos la canción y como a los dos días me responde “bella” al final logramos que pudiera grabar una canción muy linda, con arreglos de Leo, que se llama Un hombre enamorado. En el caso de Telmary fuimos al Bretch a verla actuar, ella tenía idea de que queríamos hacer un featuring con ella y lo anunció allí, así que yo dije, bueno, ya no se puede echar para atrás. A veces uno no sabe ni cómo lidiar con estas personalidades, como decirles “lo quiero así”, es difícil, pero cuando trabajas con artistas tan humilde, termina siendo fácil.  
Y el otro featuring que tengo dentro del disco, es un descubrimiento, Leticia Beatriz Trueba, una voz riquísima, una voz bella. Ella fue la que hizo todos los coros del disco, es un poco tímida, pero le dije a Leo, vamos a hacer una canción para Lety, porque yo quiero que ella esté en el disco”.

Música para llegar a los jóvenes

“Cuando nosotros lanzamos mi primer disco No me faltes, yo lo lancé con toda la inocencia que se lanza un disco de un joven que piensa que se va a comer el mundo y que de pronto se va a pegar y que toda Cuba lo va a escuchar. Cuando comenzamos a defenderlo en vivo nos dimos cuenta de que eso no iba a ser tan así, que por muchos videos que hicimos, que sin duda me funcionaron muchísimo en la promoción del disco, no íbamos a llegar a ese público meta que nosotros pensamos desde el principio, que era la juventud”, recuerda Luis Franco.

Sobre esta experiencia se tejieron sus intenciones para “Sí”: “Yo me fui dando cuenta de que no era solamente un problema mío, sino que era un problema de cómo se está moviendo el  mercado de la música hoy en día, qué es lo que los jóvenes están realmente queriendo escuchar, qué es lo que los mueve a ir a los lugares y esa filosofía que fui creando de los jóvenes lo que estaban buscando, cómo se estaba moviendo el mundo de la música, fue lo que me fue transformando mi manera de pensar y mi manera de proyectar mi carrera, eso yo pienso que se traduce en este álbum”.

“Es una preocupación constante cómo atacar ese público joven, que busca esa sonoridad un poco más moderna y también  tratar de ponerle en los oídos un mensaje un poquito más claro, más bonito, no la agresividad esa que a veces se oye en la música moderna, entonces, cómo lograr poner todo eso en un disco. Bueno, mira, yo no sé si lo logramos, pero sí sé que lo intentamos hasta el final”.