Los cubanos Lázaro Martínez (derecha, plata) y Cristian Nápoles (izquierda, bronce) se abrazan tras conseguir medallas en el Mundial de atletismo. En Budapest, el 21 de agosto de 2023 © Ben Stansall / AFP

El cubano Lázaro Martínez, subcampeón del mundo de triple salto en Budapest, se mostró 'contento' por subir al podio junto con su compatriota Cristian Nápoles, bronce, al que considera su hermano, y dijo que con vistas a 2024 trabajará 'duro para batir' al burkinés Hugues Fabrice Zango y también asaltar el récord del mundo que posee el británico Jonathan Edwards con 18.29 metros.

La baja por lesión del portugués Pedro Pichardo, gran dominador del triple salto mundial los últimos años, abrió la posibilidad de victoria a otros candidatos y el principal, Hugues Fabrice Zango, no falló para escalar del segundo puesto en Eugene 2022 al primero en el campeonato de Budapest.

Al lado de Zango en el podio se situó Lázaro Martínez, que, con 17.41, quedó segundo dando muestra de su potencial y de su progresión como atleta, como ya demostró en el Mundial de pista cubierta de 2022 de Belgrado que se adjudicó con una gran actuación.

'A diferencia de los demás atletas cubanos aquí en Budapest, yo no he venido en mi mejor forma. Me lesioné durante los Juegos Centroamericanos, así que no pude prepararme bien para la competición más importante del año. A pesar de eso, hice todo lo posible para terminar en el podio. Y lo logré', dijo en el Centro Nacional de Atletismo de Budapest Lázaro Martínez, contento también por el bronce logrado por Cristian Nápoles.

'Es como mi hermano, al igual que los demás atletas cubanos. El triple salto en nuestro país tiene una verdadera tradición. Quizás tengamos la mejor escuela del mundo para esta prueba. Todos los años salen de ella jóvenes talentos y el objetivo para nosotros es estar en lo más alto del mundo', comentó.

'Zango es muy buen saltador de triple pero trabajaremos duro para batirle el año que viene y quizá batir también el récord mundial de Jonathan Edwards', concluyó.