La Organización Mundial de la Salud (OMS) muestra su indignación por el ataque israelí contra un grupo de trabajadores de la organización benéfica World Central Kitchen (WCK) en Gaza, de acuerdo con el jefe de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.

"Estamos indignados por el asesinato de los trabajadores humanitarios en Gaza. La seguridad es un requisito básico para la entrega de ayuda vital", escribió Ghebreyesus en su cuenta de la red social X.

Además, expresó sus condolencias profundas al equipo de la WCK y a las familias de los afectados. El jefe de la OMS volvió a llamar a "la protección permanente de los trabajadores humanitarios en todo el territorio de Gaza".

El 2 de abril, la WCK anunció que suspende con carácter inmediato sus operaciones humanitarias en Gaza tras un ataque del Ejército israelí a un convoy que acababa de entregar 100 toneladas de alimentos en un almacén de Deir al Balah, en el centro del enclave palestino.

El bombardeo se saldó con siete muertos, nacionales de Australia, Polonia, el Reino Unido y Palestina, más una persona con doble ciudadanía de Estados Unidos y Canadá. Las Fuerzas de Defensa de Israel anunciaron que están tratando de esclarecer las circunstancias del incidente.