LA FOTO: Sobre las olas
especiales

Fotos: Zohra Bensemra/ Reuters
Senegal tiene su primera surfista profesional: se llama Khadjou Sambe y tiene 25 años. En otros lugares del mundo resultaría normal que una mujer se subiera sobre una tabla y desafiara las olas, pero para muchos países de África el hecho deviene hito cultural. Nunca antes una mujer negra había surcado el Atlántico frente a estas costas. Y hay muchos allí que creen que es una barbaridad, una falta de respeto, una rebeldía que habría que castigar.
Khadjou no los escucha. Ella mira el horizonte. Y no quiere ser la única. Ha creado una academia en el puerto de Ngor, en el que estudian compatriotas suyas que no resignan a la cocina y los trabajos del campo. «Tápense los oídos» —les dice Khadjou cuando alguien las critica.
Abrir mentes puede ser más difícil que subirse sobre una ola. En eso andan ellas, conscientes de que lo que hacen es un granito de arena ante el muro inmenso de los prejuicios y la explotación. Lo de ellas no es una revolución, es un grito en medio del silencio.
A Khadjou todas esas preocupaciones se le olvidan en el mar. «Cuando estoy en el agua siento algo extraordinario, algo especial en mi corazón». Millones de mujeres en África y tantos otros lugares nunca podrán aspirar a ese privilegio, lamentablemente. Pero reconforta al menos una pálida luz en medio de la oscuridad. La espuma de la cresta.
- Añadir nuevo comentario
- 2192 lecturas
Comentarios
Eva
Añadir nuevo comentario