Hongos hiperproteicos para remplazar a la carne

Hongos ricos en proteínas con un sabor similar a la carne, de fácil digestión y con un impacto ambiental significativamente menor (hasta un 61% inferior al de las técnicas de producción tradicionales), se obtuvieron a partir de una modificación genética.
   
Estos hongos se obtuvieron mediante CRISPR, la técnica de corte y reconstrucción de ADN, que permitió la modificación genética de la especie Fusarium venenatum sin añadir ADN extraño, sino eliminando dos genes.
   
El resultado, publicado en la revista Trends in Biotechnology, es obra de un equipo de investigación liderado por la Universidad de Jiangnan, en China, y abre el camino a alternativas más sostenibles a la carne.
   
Actualmente, la producción de Fusarium venenatum requiere una gran cantidad de recursos: las esporas se cultivan en grandes tanques metálicos llenos de azúcar y otros nutrientes como el sulfato de amonio.

Además, esta especie presenta una característica indeseable: sus paredes celulares son muy gruesas, lo que dificulta la digestión de los nutrientes por parte de los humanos.
   
Para abordar estos problemas, un grupo de investigadores liderado por Xiao Liu utilizó la técnica CRISPR para eliminar dos genes.

Esto redujo el grosor de las paredes celulares, aumentando así la disponibilidad de proteínas para la digestión.
   
Además, mejoró el metabolismo del hongo, disminuyendo sus necesidades nutricionales para el crecimiento.
   
Los análisis demostraron que la nueva cepa requiere un 44 % menos de azúcar y crece un 88 % más rápido. Además, su producción reduce las emisiones de gases de efecto invernadero hasta en un 60 % y, en comparación con la avicultura convencional en China, requiere un 70 % menos de tierra y reduce el riesgo de contaminación del agua en un 78 %.