Guardia Costera de EEUU anuncia nueva medida referente a Cuba
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La Guardia Costera de Estados Unidos anunció la imposición a partir del 2 de abril de nuevas condiciones de entrada para embarcaciones procedentes de Cuba, según publicó hoy el Registro Federal.
«Estas condiciones tienen por objeto proteger a Estados Unidos de las embarcaciones procedentes de puertos extranjeros o lugares con medidas antiterroristas deficientes», dijo.
El aviso se rige por la Ley de Seguridad del Transporte Marítimo y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), que impone condiciones de entrada a las embarcaciones que arriben a aguas estadounidenses desde puertos extranjeros que, según la Guardia Costera, no mantengan medidas antiterroristas eficaces.
La normativa enmendada establece que el DHS considerará que cualquier puerto bajo la jurisdicción de un gobierno extranjero que sea un Estado patrocinador del terrorismo (SSOT) no cuenta con medidas antiterroristas efectivas.
Por lo tanto, de conformidad con el Título 46 del Código de los Estados Unidos, Sección 70108, enmendado, y la arbitraria designación de Cuba en la lista unilateral SSOT del Departamento de Estado, la Guardia Costera considera que la nación caribeña no cuenta con medidas antiterroristas seguras.
En la lista de Estados Unidos aparecen además Camboya, Camerún, Comoras, Cuba, Yibuti, Guinea Ecuatorial, Gambia, Guinea-Bissau, Irán, Irak, Libia, Madagascar, Estados Federados de Micronesia, Nauru, Nigeria, Santo Tomé y Príncipe, Seychelles, Sudán, Siria, Timor Oriental, Venezuela y Yemen.
Washington también puso a Cuba en una relación de 43 países que ha causado indignación entre líderes caribeños. Se trata de una propuesta de prohibición de viajes que podría impedir la entrada a Estados Unidos de ciudadanos de Haití, Cuba y Venezuela, entre otros.
Así como las restricciones de visas a funcionarios cubanos y de terceros países relacionados con los servicios médicos de la isla en el exterior.
El pasado 25 de febrero el secretario de Estado, Marco Rubio, anunció la ampliación de una política ya vigente para la restricción de visados vinculada con Cuba destinada a torpedear su colaboración internacional en el campo de la salud, una noble y humanitaria misión que ha llevado a más de 60 naciones.
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