Granma, a trabajar duro y sin improvisaciones

Con la premisa de llegar a cada persona afectada y resolver los problemas en el menor tiempo posible, la provincia de Granma amaneció hoy en mejores condiciones climatológicas para comenzar a recuperarse del efecto de las intensas lluvias en el oriente cubano.

   A trabajar duro y sin improvisaciones, y esmerar la disciplina y el control de los diferentes procesos, convocó el vice primer ministro Jorge Luis Tapia Fonseca, en videoconferencia de evaluación con las máximas autoridades del territorio y sus 13 municipios, jefes de sub-grupos provinciales e integrantes de la comisión gubernamental enviada por la máxima dirección del país.

   Tras revisar la situación puntual de cada localidad al amanecer de este domingo, demandó especial atención sobre las comunidades que permanecen aisladas, como Minas del Frío, en Bartolomé Masó; San Apapucio, en Bayamo; nueve en zonas bajas de Manzanillo y más de 40 en las serranías de Guisa y Buey Arriba, estas últimas por fuertes deslizamientos de tierra.

   Frente a lógicas preocupaciones por la crecida de los ríos aguas abajo del embalse Cauto el Paso, la delegada de Recursos Hidráulicos, Marbelis Campo Busquet explicó que, según lo previsto, anoche se incrementó el volumen de vertimiento, pero la tendencia es a la disminución, de mantenerse el actual cese de la lluvia y la reducción de los escurrimientos.

   Tapia Fonseca puntualizó la distribución de la harina de trigo para garantizar el pan en todos los municipios, además del completamiento de la canasta familiar normada y otros alimentos con destino a los sitios más afectados.

   Conoció detalles y dio orientaciones precisar al sector de la Construcción, que organiza el traslado de recursos, equipos y personal especializado, a fin de iniciar la recuperación en cuanto las condiciones del terreno lo permitan, como ya sucede desde hoy en puntos de Jiguaní y Buey Arriba.   

   Conforme mejora el escenario climatológico hay que priorizar las labores de limpieza e higienización, para resarcir los daños con una verdadera tormenta de trabajo que involucre a ciudadanos, organizaciones de masas, consejos populares, delegados y grupos comunitarios, añadió el dirigente, quien elogió el ejemplo del pueblo de Jiguaní.

   Los sistemas de alimentación y otros servicios básicos tienen que llegar a todas las comunidades, por cualquier vía o alternativa posible, subrayó Jorge Luis Broche Lorenzo, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y jefe del Departamento de Atención al Sector Social.

   Son grandes los retos y hay que sacar experiencias de esta compleja situación, mientras ahora toca ajustar mecanismos de trabajo y movilizar a cada cuadro y revolucionario, para lograr recuperarnos en el menor tiempo, a partir de multiplicar los ejemplos de decencia, resistencia y vergüenza del pueblo de Granma, agregó.