Elsis Telechea Mendoza y su hijo Daniel Telechea, sufren los efectos del bloqueo económico, comercial y financiero de los Estados Unidos contra Cuba, en el Centro Regional de Cirugía Neonatal, adscrito al Hospital Pediátrico Octavio de la Concepción y de la Pedraja de Holguín.

Una malformación congénita tracto rectal, diagnosticada al nacer, ha hecho de este centro asistencial, la segunda casa de Danielito, residente en la provincia de Granma y sometido a varias cirugías para la corrección de la anomalía, pese a la escasez de recursos.

Elsis Telechea, de 26 años de edad, resaltó a la ACN la atención proporcionada por el equipo multidisciplinario de expertos, quienes los han tratado como una verdadera familia, en medio de la tensa situación económica, donde el sistema de la salud pública es uno de los más afectados.

Precisó que el infante se encuentra ya en la etapa del cierre de la colostomía y ratificó su agradecimiento por el éxito del tratamiento, totalmente gratuito, como parte de los programas sociales impulsados por la Revolución cubana.

A su vez, la doctora Yanet Hidalgo Marrero, especialista en segundo grado de cirugía neonatal y jefa de este servicio en la institución asistencial, señaló que la política genocida ocasiona la carencia de insumos como sondas, suturas, material protésico, mallas para el tratamiento quirúrgico y medicamentos, a pesar de lo cual se ha logrado un elevado índice de supervivencia en los últimos cinco años.

Puntualizó que el Estado otorga la máxima prioridad a este sector poblacional mediante la distribución de suministros, con los cuales se garantiza la vitalidad en el tratamiento de malformaciones congénitas en recién nacidos, entre ellas en el pulmón, el tubo digestivo, los defectos de la pared abdominal y la atresia esofágica.

Significó la introducción de tecnologías de avanzada para la cirugía intestinal sin colostomía y la aplicación de diversas modalidades de ventilación en la hernia diafragmática, aun cuando el bloqueo obstaculiza también el acceso a investigaciones y equipos de última generación.

Añadió que la instalación beneficia a pacientes de Las Tunas, Granma, Santiago de Cuba, Camagüey y Holguín, donde se ejecuta la protocolización de cada caso, teniendo en cuenta el traslado, la intervención quirúrgica y el seguimiento a la recuperación, priorizando la calidad de vida.

El bloqueo impuesto por Estados Unidos desde 1962 ha causado daños millonarios al sector de la Salud, a pesar de lo cual Cuba asegura el acceso, la gratuidad y la calidad de los servicios de atención, protección y recuperación a todos los ciudadanos.

Esta ley inhumana niega el acceso a tecnologías médicas de procedencia estadounidense con más de un 10 por ciento de componentes provenientes de ese país, lo cual tiene impactos negativos en programas nacionales como el de Atención Materno Infantil, al Paciente Grave, el Integral para el Control del Cáncer y hacia varios proyectos dirigidos a la prevención de enfermedades no transmisibles.