Declarada Monumento Nacional la Biblioteca Nacional de Cuba

Coincidiendo con el aniversario 60 de Palabras a los intelectuales, este 30 de junio le fue entregada a la Biblioteca Nacional José Martí la tarja que la acredita como  Monumento Nacional de la República de Cuba, según una nota publicada en el sitio web de la institución.

Sonia Virgen Pérez Mojena, presidenta del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, dio lectura a la Resolución y destacó que esta condición se le entrega a la Biblioteca Nacional teniendo en cuenta su valor artístico, ambiental y social, cuya construcción forma parte del centro político y administrativo de la nación y uno de los espacios públicos de mayor significación para los cubanos. 

Resaltó, además, que la Biblioteca mantiene un excelente programa de gestión de conservación del inmueble y se destaca en la preservación, investigación y difusión del patrimonio bibliográfico, así como en la producción cultural y científica. 

Kenelma Carvajal Pérez, viceministra de Cultura,  y Omar Valiño Cedré, director de la institución, develaron  la tarja.

Al hacer uso de la palabra, Valiño Cedré resaltó el tremendo significado y honor que resulta para la Biblioteca Nacional y su colectivo que en fecha tan importante como el 30 de junio, a esa institución —donde Fidel pronunció su histórico discurso— se le entregue esta condición, y a 120 años después de su fundación por Domingo Figarola Caneda. 

Se encontraba presente en el acto la  secretaria general del Sindicato de trabajadores de la Cultura, Katia María Rodríguez Ramos, y Nilson Acosta Reyes, presidente de la Comisiòn Nacional de Monumentos. 

La Biblioteca Nacional de Cuba José Martí es la  institución que preserva el patrimonio bibliográfico nacional, es rectora del Sistema Nacional de Bibliotecas Públicas y propone las políticas bibliotecológicas del país. Fue fundada el 18 de octubre de 1901 en el Castillo de la Fuerza.

Se entiende por Monumento Nacional todo centro histórico urbano y toda construcción, sitio u objeto que, por su carácter excepcional, merezca ser conservado por su significación cultural, histórica o social para el país y que, como tal, sea declarado por la Comisión Nacional de Monumentos.