Cuatro miembros de una familia fallecieron en un tiroteo dentro de una vivienda ubicada en el condado texano de Bowie, EE.UU., a unos 240 kilómetros al este de Dallas, informaron el martes fuentes de la oficina del alguacil del condado.

Reportes de prensa describen que las fuerzas de emergencia recibieron una llamada al servicio del 911 denunciando que un hombre disparaba contra personas que se encontraban dentro de una vivienda, amenazando también con suicidarse.

El sospechoso, de 18 años de edad, se atrincheró por más de dos horas dentro de la casa móvil donde se desató el tiroteo en la comunidad de Nash y después de negociar con la policía se entregó a las autoridades.

La policía declaró que consideran que las cuatro personas halladas muertas dentro de la vivienda pueden ser miembros de una misma familia.

El sospechoso, que no ha sido identificado aún, se encuentra bajo custodia policial en la cárcel del condado, en espera de que avance la investigación y se le impongan cargos.

El tiroteo ocurrió apenas tres semanas después de que un emigrante mexicano disparara contra sus vecinos, matando a cinco personas de nacionalidad hondureña, incluido un niño de ocho años, en una vivienda en el condado de San Jacinto (Texas), a unos 90 kilómetros de Houston.