Cooperación japonesa en transporte y equipos médicos llegará a Cuba en 2021

Cuba espera, para 2021, la llegada de equipos médicos destinados a varios hospitales del país y de 84 ómnibus para la transportación urbana en La Habana, como parte de la ejecución de los donativos ofrecidos por el gobierno de Japón a la Isla, a través de la Cooperación Financiera no Reembolsable.

En un intercambio sostenido la víspera entre el embajador cubano en la nación asiática, Miguel Ángel Ramírez, y el presidente de Japan International Cooperation System (JICS), Kobu Toru, se ratificaron varios proyectos de cooperación, entre los cuales se encuentran los mencionados.

De acuerdo con una nota de la Cancillería, Kubo resaltó especialmente la colaboración lograda entre la agencia nipona y la nación caribeña en la última década, y manifestó sentirse orgulloso de que su organización trabaje con la mayor de las Antillas.

El presidente de JICS reconoció el trabajo realizado por Cuba para enfrentar la pandemia de COVID-19, así como la calidad y alto nivel de la medicina cubana, que en esta etapa ha estado a disposición de numerosas naciones para combatir la enfermedad del nuevo coronavirus, una ayuda que merece respeto, remarcó.

La Isla inició, desde el pasado 12 de octubre, un periodo de nueva normalidad en la mayor parte del país, debido al control de la epidemia.

El actual escenario incluye la reanudación de las actividades económicas y de servicios, incluidos el acceso de turistas al balneario de Varadero y el reinicio de las operaciones aéreas en casi todas las terminales, excepto La Habana.

Sobre el tema dialogó el Embajador cubano, quien comentó acerca de los protocolos médicos desarrollados por la nación caribeña contra la pandemia, que incluyen alrededor de 15 medicamentos de producción propia.

Entre esos promisorios resultados se encuentra el candidato vacunal Soberana 01, en ensayos clínicos desde finales de agosto, con avances positivos hasta el momento.

Ramírez agradeció además la contribución de los proyectos de JICS para el programa de desarrollo económico y social cubano, y se refirió a las recientes medidas adoptadas por Estados Unidos contra su país, para reforzar el criminal bloqueo económico, comercial y financiero que le impone desde hace casi 60 años.

El Embajador antillano igualmente abordó la política agresiva de Washington contra la Revolución, que actualmente ataca la cooperación médica internacional que presta la Isla mediante una intensa campaña difamatoria.