Con la vida en nuestras manos

La Organización Mundial de la Salud anunció desde el pasado 5 de mayo el inicio de la campaña por el Día Mundial de la Higiene de Manos, que hoy se celebra. Pero es probable que a estas alturas del partido no haga demasiada falta explicar por qué es importante en estos tiempos lavarse las manos.

Es probable que de todas las acciones que cotidianamente realizamos los humanos, lavarse las manos sea la que más hemos repetido desde que el coronavirus Sars-Cov-2 asomó su peluda oreja en nuestras vidas hace ya más de dos años.

No obstante, ahora que han comenzado a flexibilizarse algunas medidas en nuestra Isla sería bueno recordar que las más elementales indicaciones higiénico-sanitarios no han variado.
 

Sigue siendo muy importante lavarse las  manos al llegar de la calle, para cargar al bebé, luego de ir al baño, antes de preparar e ingerir alimentos, y un largo etcétera.

El pomito con solución hidroalcohólica o hipoclorito que no se quede en casa, y tampoco olvidar el hábito de aplicarse esa solución a la entrada y salida de establecimientos y trasportes públicos. Sería muy triste después de tanto nadar, ahogarse en la orilla.

Este Día Mundial de la Higiene de Manos –instituido desde 2009 por la OMS- vale además celebrar que ese hábito, no siempre practicado por todos antes de la pandemia, haya sido adquirido por una gran mayoría de la población.

Y no debería perderse nunca, porque no solo el nuevo coronavirus es una amenaza. También existe un ejército de microorganismos que pueden atentar contra la salud y tienen la posibilidad de penetrar a nuestro cuerpo a través de las manos, en particular los que atacan al sistema digestivo. 

Aún cuando la Covid-19 se convierta algún día en un mal recuerdo, el lavado de manos es una práctica indispensable porque, como indica el tema de la OMS para la campaña de este 2021, son “Segundos que salvan vidas”.