Baloncesto cubano: Entre LSB y aires de rendimiento extrafronteras

La Liga Superior de Baloncesto continúa carburando, pese a situaciones adversas en varias provincias asociadas al alojamiento, alimentación y condiciones de vida de los equipos inmersos en la competición. Por sobre eso, se imponen los deseos de crecimiento individual de sus protagonistas, luego de un impasse de tres años, y con las aspiraciones de una posible contratación posterior en algún certamen liguero de mayor aval.

Sí, porque es incuestionable el hecho de que el principal torneo de los encestes doméstico, considerado durante muchos años el segundo mayor espectáculo deportivo cubano después de la Serie Nacional de Béisbol, deviene el nicho fundamental de desarrollo de jugadores en las diferentes provincias, con su eslabón primario del Torneo Nacional de Ascenso, y el seguimiento que en mayor o menor medida puedan darle a aquellos jugadores que despunten con talento notable desde las categorías escolares las academias provinciales.

Así, transcurre el certamen, con el techo de calidad limitado producto de que muchas de las principales figuras de los elencos involucrados se desempeñan a nivel de clubes en otras latitudes. Lo cual considero muy positivo en materia de desarrollo individual y adquisición de otras visiones y conceptos, pero al igual que sucede con la pelota, disminuye el nivel cualitativo de nuestra competición.

Precisamente ese elemento ha incidido en el hecho de que, Ciego de Ávila, incluyendo los desenlaces de este jueves, marchara invicto en ocho salidas, apoyado en una columna vertebral bien experimentada, y con aval de haber integrado selecciones nacionales incluso. Me refiero a William Granda, Yoan Luis Haití, Yasser Rodríguez, Vanier Reyes, Yordanis Jaca… a quienes se suman con buen accionar los menos curtidos Omar Álvarez, Daniel Castellanos y Yoimar López.

Capitalinos (6-2) secunda a los Búfalos, en buena medida avalado por rendimientos de la nueva hornada de jugadores, como el internacional Marcos Chacón, y Héctor Martinto, a quienes se suman los de mayor kilometraje Edson Standard y Daniel Simón, además del refuerzo Yosiel Monterrey y Raimil Cordero, en calidad de figuras con destaque ofensivo y bajo los tableros.

Hablamos de un quinteto que además de Jasiel Rivero, Karel Guzmán, y Neysser Coutín, también tiene militando en otros escenarios a Lisván Valdés, Oreste Torres, Malvin Cairo, y Freddy Marín, por solo citar los de mayor peso con accionar extra fronteras. Santiago de Cuba, y el actual subcampeón de Artemisa con idénticos (4-4) completan el cuarteto de vanguardia.

Entre damas, el panorama es muy similar en materia de posiciones cimeras. Ciego y Capitalinas (6-2) llevan la batuta de la competición, y entre las principales animadoras de la justa ausentes se encuentran la espirituana Yamara Amargo, y la pinareña Anisleydis Galindo, quienes cumplen compromisos contractuales con rendimientos sumamente loables en el certamen liguero femenil de México, y se erigen como dos baluartes de nuestra selección nacional igualmente.

Números hacen fe

Una mirada a las estadísticas colectivas del certamen varonil, luego de las tres primeras subseries arroja que Santiago de Cuba es la armada que mejor efectividad de campo (47%) y de dos puntos (52%) exhibe, como parte de un torneo en el que colectivamente se promedia para 42 y 48 puntos porcentuales por ese orden en dichos acápites.

Los tiros libres siguen siendo una asignatura pendiente perenne, algo así como un lastre, pues se computa de forma global apenas el 62%, y también acá son los indómitos los que mejor cobran, para un 67% que deja mucho que desear si tomamos en cuenta que una media de conjunto aceptable debería frisar o superar los 80 puntos porcentuales.

Otro indicador en el plano de lo cuestionable está relacionado con el control del balón y los tiempos de juego, llevar los ritmos de partido con acierto y tener esa capacidad para encontrar al hombre en mejor posición de tiro y asistirle. Tal es así que la relación asistencias-pérdidas de balón se fija en 463-769, lo que da la medida de una diferencia abismal en este acápite y dice de la desorientación y desapego a planteamientos tácticos de los conjuntos inmersos en la Liga, incluso a aquellos que pueden considerarse de dominio básico.

Aquí son los Toros artemiseños los que más pases de enceste conceden a sus compañeros (107), pero también son los segundos que más pierden la esférica (117), únicamente superados por Matanzas (133), plantel que no conocía la victoria al momento de redactar estas líneas.
En cuanto a los rebotes, el quinteto de mayor calibre es Capitalinos con 224 divididos en 70 ofensivos y 154 defensivos, sin computarse la última subserie; y acechados por los Búfalos avileños, dueños de 216 (63-153).

Los indómitos (155) son la armada que más pelotas recupera, en tanto los yumurinos son los que más faltas personales cometen con (126). Aquí hacemos una alerta, pues Villa Clara acumula 11 faltas técnicas, más casi dos por desafío.

En el caso de las féminas, esta mirada estadística no fue posible, pues en el sitio de la Liga, solo aparecen reflejados los números de los seis planteles con apenas dos o tres juegos compilados.

Jasiel, puntal e intratable con el Valencia

Mientras esa es la realidad en casa, y luego de que el club MHP Riesen Ludwigsburg del camagüeyano Yorman Polas eliminara 79-73al U-Banca Transilvania Cluj Napoca del capitalino Guzmán y se clasificara a la Final Four de la Basketball Champions League; el ala-pívot antuillano Jasiel rivero acaparó titulares con el Valencia una vez más, convertido en referente de su plantel, verdugo por 98-80 del también alemán Hamburg Towers, en desafío correspondiente a los octavos de final de la Europa League.

Rivero, o “el Papi” como se le conoce en el mundillo de los encestes taladró a la defensa teutona en zona pintada con noche perfecta al encestar sus ocho intentos al aro, además de cinco de seis tiros libres, performance que aderezó con cuatro rebotes y tres robos de balón; además de su habitual agresividad en el canasto, y capacidad de desdoble para complementar a otros compañeros en ataque, ya sea dentro o fuera del perímetro.

Fue un duelo en el cual los Toronjas dominaron en todos los órdenes, enchufados en su casa del Pabellón Fuente de San Luis luego de un comienzo dubitativo y de adverso 2-9. En lo adelante comandarían las acciones, y así dan fe sus porcentajes, fijando el de campo en 57.6% de efectividad, gracias a 38 canastas en 66 intentos; en tanto sus oponentes lo hicieron para el 52.4% (33/63), a tenor de los números reflejados por la web de la competición.

También fueron superiores desde más allá del perímetro con favorables 33.3% respecto al 30.8% de sus rivales de turno, y desde la línea de los suspiros (70-60%) y sobre todo doblando los intentos de sus adversarios 20-10, lo cual habla de un sólido trabajo en la zona pintada, y mayor encare del aro en ataque.

El punto más arrollador fue en tal sentido el peso reboteador, con superioridad de 38-23 capturas bajo las tablas, y un 16-11 en materia de tableros ofensivos. Nada amigos míos, noche redonda para el Valencia, que en cuartos de final se medirá cara a cara con el francés Boulogne Metropolitans 92 el próximo día 27.