Ama al cisne salvaje

Muy temprano se fue Luis Rogelio Nogueras (1944-1985). Pero dejó tanta obra que algunos se asombran de que le haya alcanzado el tiempo. Es que este poeta —para muchos el más grande de su generación— vivió intensamente, como si cada día fuera el último, y jamás estableció distinciones insalvables entre lo vivido y lo escrito. Se escribe porque se vive.

Quizás por eso defendió la aparente espontaneidad del "conversacionalismo". Aparente, en su caso, porque sus poemas fueron fruto de un trabajo concienzudo. Su estilo era sencillo y depurado, ajeno a énfasis retóricos. Cualquier hijo de vecino puede "entender" esos versos, porque están escritos para todos los hijos de vecino, porque hablan de lo que nos pasa y lo que sentimos todos. Pero no hay concesiones populistas.

El poeta, nacido de una familia de escritores, busca la exactitud de la frase y su capacidad de conmover, o divertir, o dejar pensando... No fue simplemente un "coloquial": su creación conecta con el más refinado lirismo de la gran tradición hispanoamericana.

Luis Rogelio Nogueras, Wichy el Rojo, escribió uno de los más hermosos textos de la poesía cubana de todos los tiempos, Ama al cisne salvaje. Y esa es, al mismo tiempo, una declaración de principios y una inspiradísima explicación del misterio del arte:  

No intentes posar tus manos sobre su inocente
cuello (hasta la más suave caricia le parecería el
brutal manejo del verdugo).
No intentes susurrarle tu amor o tus penas
(tu voz lo asustaría como un trueno en mitad de la noche).
No remuevas el agua de la laguna, no respires.
Para ser tuyo tendría que morir.
Confórmate con su salvaje lejanía
con su ajena belleza
(si vuelve la cabeza escóndete en la hierba).
No rompas el hechizo de esta tarde de verano.
Trágate tu amor imposible.
Ámalo libre.
Ama el modo en que ignora que tú existes.
Ama al cisne salvaje.

Hace 35 años murió Luis Rogelio Nogueras. Poeta, novelista, editor, periodista, investigador, crítico, guionista. Viajero impenitente. Hombre de intensos amores. Dejó una legión de amigos desconsolados. Dejó mucha belleza inasible, indómita, libre...