Abogan por inscribir al Vedado habanero como Patrimonio Mundial

La Oficina Regional de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) no renuncia al sueño de inscribir al barrio habanero El Vedado en la lista de Patrimonio Mundial, y para ello desarrolla acciones que contribuyan a ese objetivo.

Por cuarta ocasión esa organización convoca a la jornada de puertas abiertas, un evento que tiene como fin destacar y compartir el patrimonio arquitectónico del emblemático barrio de la capital de Cuba, según trascendió en una nota de prensa enviada a esta redacción.

El venidero sábado desde las 10.00 a.m. hasta las 5.00 p.m. el público podrá apreciar inmuebles de gran relevancia artística e histórica que no son usuales visitar, pues son instituciones cubanas y extranjeras radicadas en la zona que permanecen cerradas al público en general, como la residencia del embajador británico, una vivienda familiar, la propia sede de la Oficina Regional de la Unesco, y otras.

La iniciativa de puertas abiertas sigue la ruta de las desarrolladas en el verano del año 2023 y en la primavera de 2024, en las cuales participaron jóvenes, estudiantes y familias habaneras y en esta ocasión fueron seleccionados inmuebles patrimoniales de reconocido interés artístico y adecuada conservación.

Sensibilizar a quienes prefieran el sábado recorrer El Vedado capitalino sobre los valores urbanos y culturales del conocido barrio y estimar la arquitectura que guarda historias memorables constituye también objetivo del evento.

Las sedes de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, del Ballet Nacional, la casa que acoge a la dirección de la Federación de Mujeres Cubanas, el museo nacional de Artes Decorativas y el museo biblioteca Servando Cabrera Moreno (Villa Lita) también se incluyen en el amplio recorrido organizado por la Unesco.

El Vedado está ubicado en el municipio de Plaza de la Revolución y lo integran los Consejos Populares Rampa, Vedado-Malecón, Carmelo y Príncipe, según el historiador Emilio Roig de Leuchsenring los inicios de la creación del sitio comenzó en el año 1858 cuando aprobaron la parcelación de la estancia El Carmelo, propiedad de Domingo Trigo y Juan Espino, con un total de 105 manzanas.

Cuando José Frías, Conde de Pozos Dulces y sus dos hermanas obtuvieron permiso de parcelación de su finca nombrada El Vedado, que se extendía desde la calle Paseo hasta la Batería de la Reina, situada donde hoy se levanta Hotel Nacional de Cuba, alcanzó mayor auge.

En el año 1870 apenas había 20 casas ubicadas a lo largo de la calle Línea, llamada así porque por allí pasaba el ferrocarril que unía la pequeña parcelación con el centro de La Habana, hoy El Vedado es la sede de las principales instituciones políticas y gubernamentales del país.