Topes y topes

Desde siempre se ha insistido en la importancia que tienen en el deporte los topes de preparación, muchas veces cruciales para encontrar al equipo titular en el caso de los deportes colectivos, para probar una determinada técnica o un plan táctico, etc.

Son varios los objetivos que puede tener un tope de confrontación, en dependencia del rival que se escoja, o el momento en el que tienen lugar con respecto a la competencia más importante del año, pero siempre debe ser provechoso.

Sin embargo, cuando se topa por topar, por simplemente ver caras nuevas enfrente, es discutible la realización de un enfrentamiento.
El tema viene a colación porque recientemente se supo que la preselección nacional de fútbol fue a la localidad matancera de Calimete a celebrar un partido de preparación con futbolistas locales, días antes de un doble enfrentamiento programado esta semana contra Guatemala, en tierras centroamericanas.

Sí, usted leyó bien. Fue contra jugadores de Calimete y sus alrededores, ni siquiera contra el equipo de Matanzas. Incluso el combinado provincial es un rival cuestionable, pues ni siquiera pertenece a la primera división del fútbol cubano, y juega en serio quizás un mes al año, cuando se prepara para intervenir en el torneo de ascenso, y luego cuando lo disputa.

Estamos hablando entonces de algún futbolista de ese equipo, que casi no juega en el año, más otros que ni siquiera han sido tomados en cuenta para sumarse al conjunto provincial. ¿Qué nivel de exigencia puede aportar eso a una preselección nacional?

Según llegó a mis oídos, el juego finalizó seis goles por uno, a favor de los “internacionales”, pero más allá de ese marcador, no sé donde pudo haber estado la ganancia para ellos. A Calimete no se llega caminando desde La Habana, o sea, que además se invirtieron recursos en hacer ese viaje, y a la larga es muy cuestionable el saldo futbolístico que deja.

La preselección de béisbol que participó en los pasados Centroamericanos realizó varios partidos con equipos de Occidente que se preparaban para la actual Serie Nacional, pero eso es diferente. Además de tratarse de planteles provinciales, con jugadores que incluso han estado en el Cuba, los recibió en el estadio Latinoamericano. Vistos los resultados en Barranquilla, pudiera ponerse en duda si estos desafíos fueron provechosos para los preseleccionados, y reitero que se trató de rivales mucho más exigentes que los matanceros.

A lo mejor golean a Guatemala, porque en el deporte todo es posible, aunque esto lo dudo mucho, pero de todas maneras, las autoridades competentes deben reflexionar un poco mejor sobre qué les conviene más a los futbolistas como tope de preparación, para conseguir algo que de verdad los prepare con vistas a un compromiso futuro.