Díaz-Canel Bermúdez intervino este sábado en la sesión final de la XI Conferencia Nacional de las BTJ, con sede en el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), donde dijo que si trabajan en ese sentido puede lograrse el objetivo, expresado sobre todo en la innovación.

Aclaró que tal propósito constituye una asignatura pendiente, aunque mencionó experiencias como las del Grupo de las Industrias Biotecnológica y Farmacéuticas (BioCubaFarma), creado en 2012 para producir medicamentos, equipos y servicios de alta tecnología, destinados a mejorar la salud del pueblo y la generación de bienes y servicios exportables.

Manifestó su respaldo al cierre de los ciclos de diseño, producción y comercialización para que haya un aporte que permita el crecimiento económico de la empresa estatal socialista y el fondo para proseguir la investigación y la innovación.

Son necesarios procesos más eficientes, productivos, con mejores rendimientos y mayor eficiencia, y solo se pueden alcanzar mediante la informatización de los servicios de la sociedad y de la automatización, aseguró.

Precisó que el encuentro evidenció el legado del Comandante en Jefe Fidel Castro sobre el rol de la ciencia en el auge científico-tecnológico de la nación, y su enfoque político e ideológico.

Díaz-Canel Bermúdez; Marta Ayala Ávila, también del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y vicedirectora general del CIGB, así como Susely Morfa González, primera secretaria del Comité Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas, entregaron los premios correspondientes a la XV Exposición Nacional Forjadores del Futuro y del Foro sobre medio ambiente EcoJoven.

Sus autores sesionaron desde el jueves en la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI).

En sus deliberaciones presentaron 66 innovaciones, racionalizaciones, invenciones, diseños e investigaciones, de los cuales el jurado reconoció 10 y otorgó 20 menciones, así como seis Premios Especiales, entre ellos el Proyecto agroecológico multifactorial CALIVID, del municipio de Banes, en la provincia de Holguín, y que recibió el licenciado José Ángel Rojas Camejo.

Tras un proceso eleccionario de su ejecutivo, Ricmar Rodríguez Gutiérrez salió reelecto al frente de la organización, surgida en 1964 y que en la actualidad cuenta con más de 80 mil 500 miembros agrupados en seis mil 906
brigadas.

Para la UJC es un orgullo y una satisfacción contar con un movimiento juvenil como brazo aglutinador de toda juventud cubana, sostuvo en la reunión Morfa González , quien felicitó a los 300 delegados, representantes de organismos y de instituciones que asistieron a los debates de la XI Conferencia Nacional de las BTJ.