Insospechado mundo descubren visitantes en fábricas de habanos

Uno de los elementos que más intriga a quienes gustan de fumar puros es la manera en que enrollan los cigarros y qué parámetros facilitan su extrema calidad, reconocida en el mundo entero.

Por tanto, algunas industrias tienen un hechizo particular para quienes visitan las factorías de tabaco, en esta oportunidad H.Upmann y La Corona, en esta capital.

Otro de los elementos que descubren es el entramado que facilita la distribución mundial de los habanos y las distintas clasificaciones que parten de las galeras, donde se producen finalmente.

Algo que muchos fumadores desconocen es la red alrededor del comercio de estos cigarros, que incluye una bien sustentada forma de distribuirlos.

Como meollo de este comercio, aparecen más de 34 marcas y unas 400 denominaciones alrededor de los habanos que para su eficiente comercialización tienen sus subdivisiones, algo que todo fumador debe conocer para lograr una compra ideal.

Para muchos expertos, existen cuatro divisiones, las marcas que encontrarás por todo el mundo, las de especialidad, las que comprarás en muchos países y las distribuidas solo en algunas naciones.

En el primer caso se podría mencionar a Cohiba, Hoyo de Monterrey, Montecristo, Partagás, Quintero, y Romeo y Julieta. Y en la segunda categoría podemos encontrar a Cuaba, San Cristóbal de La Habana y Trinidad.

Para muchos países, los expertos deparan Bolívar, Fonseca, Guantanamera, H.Upmann, José L. Piedra, Punch, y Vegas Robaina.

Mientras, en algunas naciones podrá comprar el aficionado solo Belinda, Cabañas, Diplomáticos, El Rey del Mundo, Gispert, Juan López, La Flor de Cano, La Gloria Cubana, Los Statos de Luxe, y Por Larrañaga.

En ese segmento también se encuentran Quai D´Orsay, Rafael González, Ramón Allones, Saint Luis Rey, Sancho Panza, Troya y Vegueros.

Pero esto es solo una especie de estructura de comprensión, pues en la actualidad el habano tiene tanto empuje en el mercado tabacalero que sus consumidores pueden encontrar cualquier marca hasta en los rincones más insospechados.

De ahí que el origen definitivo de tales ventas esté en las fábricas y en la elevada calidad de esos puros, que son considerados los mejores del mundo por la triple condición de clima, suelo y experiencia de los productores.