Los Estados Unidos llegan hoy a su primer Súper Martes de la temporada electoral, el día en que 10 estados celebrarán primarias republicanas, sin que hasta la fecha se haya perfilado claramente el líder que deberá tratar de arrebatarle la Casa Blanca al presidente demócrata Barack Obama en los comicios de noviembre.

Alrededor de otra decena de estados han celebrado en los dos últimos dos meses primarias o caucus para seleccionar al candidato republicano a la Casa Blanca.

A estas alturas, el considerado ampliamente como probable ganador de la carrera electoral interna republicana, el exgobernador de Massachusetts Mitt Romney, debería haber podido proclamar ya sin dudas su calidad de favorito.

Pero no ha sido así y, aunque va a la cabeza y con amplia ventaja en lo que a número de delegados se refiere, el hecho de que siga sin poder mostrarse como favorito fuera de toda duda tiene más que nervioso a su entorno y al propio Partido Republicano, que ve con creciente preocupación cómo la indefinición de liderazgo en su seno podría perjudicarle de cara a noviembre.

De este modo, no es seguro que este Súper Martes vaya a arrojar claridad con respecto al contendor republicano, como ha sido en anteriores elecciones.

Pero lo que la gran cita electoral de hoy sí podría hacer es reducir un poco la lista de aspirantes, que pese a reveses previos se ha mantenido constantemente en cuatro postulantes durante las últimas semanas.

El último dolor de cabeza de Romney, el también aspirante Rick Santorum, introdujo el vértigo a la competencia, pues su despunte hizo que esta sea una competencia impredecible.

Romney y el ultraconservador exsenador de Pensilvania Rick Santorum se superan uno a otro por pocos puntos en sondeos en varios estados, mientras el otrora candidato, el conservador Newt Gingrich, luce como ganador solamente en Georgia, estado al que representó durante dos décadas en la Cámara de Representantes del Parlamento.

En esta confusa batalla para decidir cuál será el candidato republicano que se medirá con Obama en noviembre, Romney llega con seis estados ganados, Santorum con cuatro y Gingrich, uno. Así, los republicanos esperan que hoy sean un día para definir al elegido.