Joya barroca en añeja ciudad cubana

Remedios, octava villa fundada por los españoles en Cuba, que llega al medio milenio de existencia en junio próximo, entre sus prendas edificadas más importantes cuenta con la iglesia Parroquial, con un acentuado estilo barroco y elevados valores constructivos.

 
Levantado en el siglo XVI y reconstruido tras un derrumbe, el templo transitó por variados códigos arquitectónicos, mientras una restauración en la última centuria, le devolvió su máximo esplendor proveniente del siglo XVIII.

 
El altar mayor, tallado en cedro y laminado en oro, figura entre los principales atributos del inmueble mientras sobresale el artesonado en madera que cubre todo el techo, realizado con ornatos de relieves profundos, rasgos barrocos de las obras de la época en América Latina.

 
La Parroquial de San Juan de los Remedios tiene tres naves y una torre de 100 pies de altura con tres niveles, cada uno exhibe un estilo diferente: dórico, jónico  y corintio.

 
Hermoso y original trabajo de un artista sevillano destaca la imagen de María embarazada, junto a las de San Juan y la virgen de El Carmen, que dan nombre a los barrios, los cuales, protagonizan las parrandas remedianas, una de las festividades más antiguas de la Isla.

   
La edificación se halla inmediata a la plazoleta, construida en l851 a imitación de la plaza de armas de La Habana, originalmente dedicada a la reina Isabel II, que hoy lleva el nombre de José Martí, y forma parte del centro histórico declarado, Monumento Nacional en 1980.

 
Los historiadores locales afirman que bajo las piedras del altar mayor y en las áreas aledañas, están enterradas las familias más poderosas del lugar en el siglo XVIII,  mientras  los archivos guardan antiguos documentos de bautismo o matrimonio de los habitantes de la añeja localidad cubana.

 
Remedios, que se prepara para su importante aniversario 500, exhibe con orgullo esta bella edificación, recorrida cada año por miles de visitantes foráneos y nacionales.