El gobierno del presidente Sebastián Piñera apoyó el lunes el pedido de levantamiento del bloqueo estadounidense sobre Cuba, en el marco de un encuentro de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) en el que participaron los cancilleres de Venezuela, Chile y Cuba.

Los cancilleres de los tres países sostuvieron un prolongado encuentro para definir los temas a los que se abocará la Celac, organismo creado en febrero de 2010 e integrado por 33 países de la región, excepto Estados Unidos y Canadá.

Concluida la reunión, el canciller Alfredo Moreno fue consultado sobre si el gobierno chileno apoya el levantamiento de las sanciones a la isla. Moreno respondió que «es de esperar que eso (las sanciones) terminen. En esta materia no hay dos opiniones».

«En eso Cuba cuenta con todo nuestro apoyo», agregó Moreno en nombre del país anfitrión, que detenta la secretaría temporal de la Celac.

La asamblea general de Naciones Unidas de octubre del 2011 apoyó mayoritariamente el levantamiento del embargo estadounidense contra Cuba, por 186 votos a favor. Solo se opusieron Estados Unidos e Israel y tres países se abstuvieron.

Fue una rueda de prensa muy distendida en la que los cancilleres incluso terminaron llamándose por sus nombres de pila.

El canciller venezolano Nicolás Maduro enfrentó otra de las preguntas fuera de la agenda de la Celac, al ser consultado sobre la expulsión de la cónsul general de Venezuela en Miami, Livia Acosta, después de que se difundiera que la diplomática analizó posibles ciberataques contra computadoras del gobierno estadounidense cuando estuvo en la embajada de Venezuela en México.

«Eso lo vamos a explicar en su momento. Estamos en el momento de la Celac y por respeto a esta hermosa reunión que hemos tenido, nosotros nos circunscribimos única y exclusivamente a este tema», dijo Maduro, que declinó ampliar su respuesta y se marchó de la sala con Moreno y el canciller cubano Bruno Rodríguez.

Los diplomáticos propondrán a los jefes de Estado realizar tres sesiones: dos en Santiago y la última en Nueva York, aprovechando la reunión de la ONU, para abordar cinco temas principales, que son energía, ciencia y tecnología, infraestructura, finanzas y desarrollo social.

«Hemos elegido los sectores en los cuales somos más que separados... uniendo fuerza realmente podemos unir beneficios, porque hay mucho que aprender unos de otros», dijo Moreno.

La siguiente cumbre presidencial será en enero del 2013 en Santiago de Chile, poco después de que el mismo mes se concrete la suspendida cita Unión Europea-América Latina.

Sobre la crisis económica europea, Maduro opinó que «América Latina y el Caribe son vistos desde distintos lugares del planeta con gran interés porque en medio de esa crisis que vive el norte, Europa, los Estados Unidos, en esta región se mantienen buenas tasas de crecimiento, de inversión».

Añadió que le corresponde a Chile conducir a la Celac hacia la construcción «de una gran zona económica de desarrollo compartido, complementario, sobre la base de principios económicos y sobre la base de la gran experiencia histórica».

«Así que le ha llegado la hora a América Latina y el Caribe, sobre todo en el campo económico», añadió.

El canciller cubano Bruno Rodríguez aseveró que la Celac surge como una necesidad. «Se ha incubado sobre una necesidad de 200 años de independencia».

Concluyó que «pagamos las consecuencias de una crisis económica global que no nació en nuestra región y no es nuestra responsabilidad».