Uruguay deja a Italia fuera del Mundial

Un puñado de camisetas blancas se junta en el terreno de juego y empiezan un loco festejo que se traslada a las tribunas. Los uruguayos se abrazan allá abajo y acá arriba, porque los periodistas también lo hacemos. De aquella amargura del debut con caída ante Costa Rica, a esta clasificación heroica.

Uruguay es así, nos tiene acostumbrado a estos milagros. Solo servía ganar ante Italia y lo hizo. Así, clasificó a octavos de final y el sábado empezará a andar un camino en el que perder significa el retorno a casa, que por cierto es más de lo que el equipo de Tabárez tenía ante Italia por delante.

Para los celestes fue como empezar a jugar los octavos de final bastante antes, con mucha más presión incluso, porque solo un resultado valía para ellos. El empate en los partidos a todo o nada al menos permite la posibilidad de disputar alargue y penales, pero este martes no era así. La igualdad dejaba afuera al conjunto uruguayo.

Como en la final de 1950, ganar era la única posibilidad de seguir con vida y La Celeste lo volvió a hacer.

Con un Diego Godín soberbio en defensa y ataque, porque como para la obtención de La Liga de España por parte del Atlético de Madrid, metió el cabezazo que valió casi como un título. Porque para nosotros los uruguayos, esto era una final. Jugamos una cada partido.

Por eso el “Tata” González no encuentra aire por ningún lado pero sigue corriendo; por eso Cavani, sin hacer un gran partido, va y va y se enoja consigo mismo y con Suárez, porque el “Pistolero” tiene que aguantar la pelota y pasarla pero agacha la cabeza y corre hacia el arco. Por eso el “Cacha” Arévalo Ríos parece estar en todos lados. Y por eso el botija Giménez se consagró hoy, demostrando que hay zaguero para rato en la selección uruguaya.

Todos saltamos con el “Faraón” Godín a buscar ese córner. Todo, los más de tres millones sufridos uruguayos que parece que solo sabemos ganar así, lo levantamos un poquito para que le diera a la pelota con el hombro y decretara el gol del triunfo y la clasificación a octavos de final.

Todos saltamos con Muslera para quedarse con ese centro cuando Italia, ya en desventaja se tiró al ataque. Todos sufrimos y nos calentamos cuando Suárez metió desperdició un par de contraataques que podrían haber asegurado la victoria.

Pero también todos saltamos, nos abrazamos, quedamos roncos cuando el árbitro pitó y marcó el final del partido. Sí, Uruguay lo había hecho otra vez. Había vencido a otro campeón del mundo como Italia y lo mandó a casa igual que hizo con Inglaterra.

Uruguay ganó porque quiso hacerlo. Italia solo se defendió y, como decían los propios periodistas azzurri antes del partido, cuando sale a empatar por lo general pierde.

¿Las claves tácticas? Hubo sí, pero a esta altura no importan. Si alguien lo quiere analizar, que lo haga. Lo único que importa es que Uruguay ganó, único resultado que le servía, y está entre los 16 mejores del mundo. Otra vez.

Si alguien quiere apurarse a analizarlo que lo haga. Yo me voy a dar un abrazo con los uruguayos que andan por acá y, como yo, nunca estuvieron tan contentos de estar roncos.

URUGUAY 1- 0 ITALIA

Estadio: Das Dunas (Natal)

Árbitro: M. Rodríguez (México). Asistentes: M. Torrentera y M. Quintero (México). Cuarto árbitro: M. Geiger (Estados Unidos).

Uruguay: F. Muslera, M. Cáceres, D. Godín, J. Giménez, Á. Pereira (62', C. Stuani), Á. González, E. Arévalo Ríos, N. Lodeiro (46, N. Lodeiro), C. Rodríguez (77', G. Ramírez), E. Cavani y L. Suárez. DT: Ó. Tabárez.

Italia: G. Buffon, A. Barzagli, L. Bonucci, G. Chiellini, M. Darmian, M. De Sciglio, A. Pirlo, C. Marchisio, M. Verratti (74', M. Verratti), M. Balotelli (46', M. Parolo) y C. Immobile (70', A. Cassano). D.T. C. Prandelli.

Gol: 81' Diego Godín (U).

Amarillas: 21' Mario Balotelli, 77' Matía De Sciglio (I), 46 Egidio Arévalo Ríos, 90' Fernando Muslera (U).

Rojas: 58' Claudio Marchisio (I).