Legislador de EE.UU. califica a Obama como el deportador en jefe

Durante un acto en uno de los salones de la Cámara de Representantes en esta capital, Gómez exhibió una fotografía del mandatario junto a las de sus predecesores William Clinton (1993-2001) y George W. Bush (2001-2009).

Luego preguntó al auditorio cuál de ellos debía ostentar las cinco estrellas por su accionar en materia de regulación migratoria.

Las cinco estrellas, el más alto rango, le corresponden al Deportador en Jefe, el presidente Barack Obama, señaló el legislador.

Sin embargo, advierten analistas, Gutiérrez usó la escena para mofarse en realidad del liderazgo republicano, reacio a avanzar en una legislación que sacaría de las sombras a unos 11,5 millones de personas sin papeles residentes en la nación norteña.

Por su parte, el senador demócrata Robert Menéndez, pidió al gobernante detener las deportaciones de familiares de residentes y ciudadanos de Estados Unidos, al tiempo que criticó a los conservadores por persistir en su negativa a dar luz verde a nuevas leyes migratorias.

Mientras seguimos esperando a que la Cámara baja se despierte y pase la reforma migratoria, insto al Presidente a tomar medidas para detener deportaciones innecesarias que están separando a nuestras familias y comunidades, subrayó Menéndez la víspera durante un discurso ante la organización hispana La Raza.

El Senado federal, bajo control de los demócratas, aprobó en junio pasado una medida que avanza en el tema del otorgamiento de la ciudadanía, mientras que la mayoría republicana en la Cámara baja aboga por tratar el asunto de manera fragmentada y sin posibilidades de optar por la naturalización.

Los del partido opositor presentaron semanas atrás varios principios para debatir una reforma y donde se mostraron favorables a legalizar a los indocumentados, pero sin derecho a optar por la ciudadanía al considerarla como la "entrega de un indulto" a quienes violaron la ley.

La administración Obama deportó durante sus cinco años de gobierno a casi dos millones de personas indocumentadas, a un promedio anual de 400 mil personas, confirmó días atrás la Oficina de Inmigración y Aduanas.