Cuba y la Serie Mundial de boxeo

Luego de tres ediciones no le ha ido nada mal al certamen, pero cualquier evento de pugilismo donde no estén presentes los cubanos, tiene obligatoriamente que resentirse por la calidad.

La prueba está bien cerca, en el tope entre los cubanos y los Guerreros de México, precisamente sus primeros rivales a partir del próximo viernes. Con escasa preparación y ninguna experiencia, Cuba se llevó fácilmente el tope 7-3, pese a que estamos hablando de uno de los planteles de mejores resultados en la Serie, y casi imbatible a domicilio.

Ahora, ya sin la preocupación por tener que cambiar de estilo para el Mundial, como sucedió en esa confrontación previa, los púgiles cubanos deben verse mucho mejor, y haber limado algunas inconsistencias y excesos de confianza que les pudieron haber costado caros en aquel primer viaje a suelo mexicano.

No tengo duda alguna de que Cuba avanzará entre los cuatro primeros del Grupo B, probablemente junto a los Guerreros de México, los Astana Arlans, Los Bakú Fires y Rusia, equipos que sobre el papel lucen como más fuertes en el bien llamado Grupo de la Muerte.

El plantel caribeño es probablemente el más completo de todos los involucrados, con muy pocas divisiones dudosas, y sería una gran sorpresa que no triunfara en la gran mayoría de sus topes, para los cuales tampoco todos los clubes utilizan a sus mejores figuras todo el tiempo. Al menos así ha sido en las ediciones anteriores.

Quizás Cuba tampoco envíe a todas partes a sus principales cartas por decisiones técnicas; de cualquier manera, este ritmo de cinco asaltos de tres minutos no es el acostumbrado para los cubanos, pero sigo pensando que avanzarán sin muchas dificultades.

Por el otro apartado lucen como favoritos para avanzar más allá de marzo del próximo año Dolce&Gabbana Italia, Otamans de Ucrania, Halcones de Argelia y los Cóndores de Argentina, con una incógnita sobre los Nocauts estadounidenses.

De ahí en adelante el nivel debe subir, pero ya tendremos tiempo de analizarlo en su momento.