Dilma Rousseff "indignada" por incidente con avión de Morales

 La presidenta de Brasil se declaró el miércoles "indignada" por el incidente que sufrió el presidente boliviano, Evo Morales, impedido la víspera de sobrevolar con el avión en el que viajaba varios países europeos, y dijo que esa situación "compromete el diálogo entre los dos continentes".  

"El gobierno brasileño expresa su indignación y repudio al constreñimiento impuesto al presidente Evo Morales por algunos países europeos, que impidieron el sobrevuelo del avión presidencial boliviano de su espacio aéreo", declaró Rousseff en una nota oficial.  

Rousseff dijo que la restricción a Morales alcanza "a toda América Latina" y "compromete el diálogo entre los dos continentes y posibles negociaciones entre ellos", ante lo cual reclamó "explicación y excusas a los países implicados en esta provocación".  

Rousseff afirmó que el "pretexto noticiado" para no dejar sobrevolar el espacio aéreo, la supuesta presencia del informático estadounidense Edward Snowden en el avión de Morales, "además de fantasiosa, es una grave falta de respeto al derecho y las prácticas internacionales y a las normas civilizadas de convivencia entre las naciones".

Rousseff dijo aún que se incurrió en "riesgo de vida para el dirigente boliviano y sus colaboradores".

El avión de Morales se vio obligado a aterrizar en Viena el martes, después que Francia, Portugal, Italia y España le negaran el permiso de sobrevuelo al sospechar que pudiera viajar en el aparato el exanalista de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) Edward Snowden, requerido por Washington.

Evo Morales, que ya partió de Europa, tenía previsto hacer una breve escala técnica de camino a la Paz, este miércoles en Fortaleza, noreste de Brasil, informó a la AFP una fuerte de la Aeronáutica brasileña.  

El embajador de Bolivia en Brasil, Jerjes Justiniano Talavera, había reclamado el miércoles una manifestación de solidaridad de Brasil ante el incidente.

Snowden, requerido en su país tras revelar la existencia de un programa secreto a gran escala de Estados Unidos para espiar las comunicaciones telefónicas y a través de internet, pidió asilo a unos veinte países.

Brasil confirmó el martes que recibió un pedido de asilo a través de su embajada en Moscú, pero la cancillería informó a la AFP que ese pedido no será contestado.