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Creo que esa viña no es sólo del señor, como dice la frase bíblica, pues es de todo el que tenga vergüenza hay muchas elementos negativos, pero lo más importante es no quedarse callados, o polemizar después, es muy doloroso que un buen estudiante sea afectado por otro que compró o le llego un examen, por ahí comienza la cadena de los que trabajan no sólo en salud y después de graduados venden los servicios al mejor postor, me da la impresión que la fuente de la denuncia fueron personas honestas y dentro de ellos buenos estudiantes que se sintieron afectados en un momento de definición de su vida que es optar por la carrera de su futura profesión, ¡Corneta toque a degüello, al machete contra el DESCARAO (en cubano: fraudulento, ladrón y todo lo que se parezca)! Y viva Cuba libre (de todos esos hechos bochornosos, de los que lo hacen y los que lo permiten)